Los ataques armados de Rusia a Ucrania no dejaron indiferente al mundo del deporte, y gigantes como Manchester United e históricos como el Schalke 04 tomaron rápidas medidas y dieron un fuerte mensaje rompiendo relaciones con sus patrocinadores de aquel país.

La madrugada del jueves un avanzada militar lanzada por el presidente Vladimir Putin al este de Ucrania desató la guerra, haciendo que clubes de fútbol e incluso un equipo de Fórmula 1 tomaran cartas en el asunto.

El primero en reaccionar fue el FC Schalke 04 de Alemania, elenco que hasta ahora contaba con Gazprom, empresa energética rusa, como principal sponsor y luciendo su logo en medio de la camiseta.

A menos de 24 horas de los ataques militarizados el elenco de Gelsenkirchen anunció a través de un comunicado oficial el fin de su relación de auspicio con la gigante gasística que  actualmente es controlada por el Estado ruso.

Manchester United siguió los pasos del club germano y a través de su página web anunció el quiebre con Aeroflot, áerolínea rusa cuyo aporte total es de unos 40 millones de libras esterlinas directo al bolsillo del club.

“A raíz de los acontecimientos ocurridos en Ucrania, el club ha retirado los derechos de patrocinio de Aeroflot”, confirmaron los Red Devils.

La escuadra de Cristiano Ronaldo agregó que "compartimos la preocupación de nuestros hinchas alrededor de todo el mundo y extendemos nuestras condolencias a los afectados”.

Pero no sólo el fútbol le dio la espalda a Rusia tras el inicio de la guerra con Ucrania, y en las últimas horas la Fórmula 1 se sumó a través de la escudería norteamericana Haas, cuyo principal patrocinador es la empresa Uralkali.

El caso del equipo de F1 es muy complejo, dado que el mencionado sponsor es propiedad del multimillonario Dmitry Mazepin, quien a su vez es padre de Nikita Mazepin, piloto titular de la scudería.

El monoplaza borrará los colores de la bandera rusa de su chasis ya también quitará el nombre de Uralkali de sus redes sociales y trajes antiflama, marcando un precedente en su postura por el conflicto bélico.

De esta manera el mundo del deporte ha comenzado a darle la espalda a Rusia, dejando en claro de qué lado de la vereda están tras el estallido de la guerra con Ucrania que tiene al mundo en vilo.