El Olympique de Marsella sumará cada vez más hinchas en nuestro país luego que se confirmara la llegada de Alexis Sánchez a la escuadra dirigida por Igor Tudor en este mercado de fichajes.
Los Olímpicos disputarán la segunda jornada de la Ligue 1 visitando a Stade Brestois, y el Niño Maravilla fue citado y podría disputar sus primeros minutos en el equipo que le aseguró poder pelear por la Champions League esta temporada.
Marsella es el primer y único club francés, hasta ahora, en conquistar el trofeo más importante a nivel de clubes en Europa, luego de ganar la final de la edición de 1992/93 un 26 de mayo al AC Milan de Fabio Capello con solitaria anotación de Basile Boli a los 43 minutos del compromiso.
Valenciennes por Ligue 1, a tres días de la gran final de Europa
El Olympique de Marsella, paralelamente, disputaba la defensa de la corona de la Ligue 1 y debía enfrentar al Valenciennes a tres días de la final ante el Milan. Sin embargo, no quería causar un gran desgaste en su plantilla y buscaría una manera de poder quedarse con la victoria sin mediar mucho esfuerzo en cancha.
El partido terminó 1 a 0 a favor del Marsella que terminaría siendo campeón por quinta vez consecutiva, pero aquel día marcaría un precedente importante, ya que, meses más tarde, se daría a conocer que Bernard Tapie, presidente del club desde 1986, habría arreglado el partido.
Tres jugadores de la plantilla del actual equipo de la Ligue 2 acusaron ser contactados y posteriomente sobornados por el director general Jean Pierre Bernés, quien les entregaría 250.000 francos por medio de Eydelie, jugador del Olympique, para dejarse ganar.
Se acusó a Tapie de mejorar el pasar de los Olímpicos, tras estar en la parte baja de la tabla hasta 1989, para convertir a los hinchas en sus potenciales votantes, ya que era diputado en aquel entonces.
Caóticas consecuencias
A pesar de que hay distintas versiones e hipótesis que apuntarían a que el Marsella no consiguió lealmente su Champions League, ninguna ha sido suficiente ni concreta para quitarles el honor de serel primer y único equipo francés en obtenerla, incluso por esos años, no les fue arrebatada.
El Comité Ejecutivo de la UEFA, eso sí, decidió vetarlo de toda competencia europea y no dejarlo participar en la versión de 1993/94 por lo que no pudo defender su corona ni disputar la Supercopa ni la Intercontinental.
Además, paralelamente, desde Francia les quitaron el título de Ligue 1 conseguido ílicitamente y fueron obligados a bajar de categoría a disputar la segunda división en el curso siguiente.
