En los últimos meses, Arturo Vidal había dado que hablar fuera de la cancha luego de que se conociera un proceso judicial contra sus familiares. El King presentó una querella contra Carlos albornoz, Víctor Albornoz y Marcelo Henríquez por delitos de administración desleal, contrato simulado, negociación incompatible, otorgamiento de contrato simulado y obtención fraudulenta de créditos.
La situación se destapó en abril, cuando el mediocampista de la selección chilena y el Flamengo de Brasil arremetió con todo contra sus familiares. Esto debido a irregularidades descubiertas en medio de los balances de sus emprendimientos.
Arturo Vidal aseguraba en ese entonces haber sido estafado por los tres involucrados, dejando el caso no solo en manos de la justicia, sino también en sus redes sociales. Recordados fueron sus mensajes a través de Instagram, donde publicó hasta sus rostros y dedicó canciones con duros dardos.
Sin embargo, todo el conflicto ha llegado a su final, según reveló este martes La Tercera. Y es que el King llegó a acuerdo para terminar con la polémica por supuestos daños económicos cercanos a los 5 millones de dólares, además de traspaso de bienes y peticiones de créditos en las que figuraba como aval.
No obstante y gracias a una revisión de cuentas de los involucrados, Arturo Vidal confirmó que las cosas estaban en orden. Esto lo llevó a que en los últimos días decidiera poner fin al conflicto legal para así firmar la paz.
El medio detalla que fue el 6 de diciembre que se llevó a cabo la audiencia de sobreseimiento, donde ambas partes sellaron el acuerdo. En él, se detalla que el volante "desiste expresa y totalmente de la querella criminal y de la ampliación de la misma interpuestas en la presente causa".
Arturo Vidal pone fin al conflicto, pero se asegura el control de sus empresas
Si bien el acuerdo de Arturo Vidal y su primo termina con el problema legal, esto también modifica una parte importante. El King también finalizó cualquier vínculo empresarial con las partes, pasando a ser el administrador de ellas. Específicamente, del Club Chicureo, en el que se mostro disfrutando los últimos días de sus vacaciones.
Con esto, el mediocampista cierra un capítulo más dentro de su ya largo historial de polémicas tanto dentro como fuera de la cancha. La paz está firmada con un círculo que hasta hace un tiempo atrás era de los más cercanos y finaliza un conflicto que pudo terminar incluso en algo más en materia judicial.
