Universidad Católica recibió a Palmeiras por la ida de los octavos de final de Copa Libertadores, sufriendo una dura y polémica derrota en San Carlos de Apoquindo debido a un dudoso cobro penal. La revancha se juega el próximo miércoles 21 de julio a las 18:15 horas en Brasil. 

La primera de peligro para la UC llegó con apenas dos minutos en el reloj. Fernando Zampedri se quitó la marca y remató con pierna derecha directo al arco defendido por Weverton, pero la pelota pasó por encima del travesaño. 

Tras la aproximación inicial del Toro, el partido entró en una suerte de nebulosa. Los de Gustavo Poyet hacían un partido de tú a tú ante los brasileños, buscando presión alta y control del balón. Sin embargo, los cruzados no lograban generar opciones de abrir el marcador. 

A los 13’ el partido se detuvo durante algunos instantes debido a una falta de Juan Leiva contral Zé Rafael, que dejó al centrocampista con un notorio corte en su rostro y abundante sangre. El árbitro estimó que el roce fue de fútbol y permitió seguir el juego en San Carlos. 

Tres minutos más tarde la Católica tuvo una chance de oro. Diego Valencia quedó de frente al arco tras saque de esquina, pero le terminó dando pésimo a la pelota y el portero de Palmeiras no tuvo problemas para contener. 

Con media hora en el cronómetro la franja volvió a avisar mediante Gonzalo Tapia, que enganchó y mandó un remate fuerte y de zurda a ras de cancha, buscando sorprender a Weverton. Lamentablemente para los locales el portero estaba bien parado y evitó la caída de su portería. 

Apenas instantes más tarde, el Toro Zampedri se jugó la personal, le hizo un túnel a Benjamín Kuscevic y se quitó la marca para mandarse en carrerón hacia el área del Verdao. Desafortunadamente el zapatazo fue muy blando y terminó en las manos del arquero brasileño. 

A los 38’ se instaló la polémica en la precordillera. El juez cobró penal tras una supuesta mano de Germán Lanaro en el área de rival, y pese a la posterior revisión VAR, el silbante no dio su brazo a torcer, mostrando un preocupante desconocimiento del reglamento. 

Raphael Veiga no falló y desde los doce pasos puso el 1-0 para Palmeiras. Balde de agua fría para los de Gustavo Poyet, que se fueron al descanso cayendo por la cuenta mínima y con una dura tarea para la segunda mitad. 

A los 60’ del encuentro, Edson Puch y Francisco Silva ingresaron a la cancha en reemplazo de Gonzalo Tapia y Felipe Gutiérrez. El DT buscaba darle variantes al equipo que quedó evidentemente golpeado tras el erróneo cobro arbitral. 

A veinte minutos del final, Zanahoria Pérez se hizo grande para controlar de buena manera un remate de Wesley. El portero estuvo notable para evitar lo que pudo ser el 2-0 de los brasileños. 

Instantes más tarde Diego Valencia volvió a desaprovechar una chance increíble para la franja. El delantero cruzado quedó mano a mano con Weverton, pero nuevamente falló en la definición y el portero del Verdao detuvo el balón con el torso y sin mayores dificultades. 

Con 82’ de juego en el reloj, Gustavo Poyet mandó a la cancha a José Pedro Fuenzalida en reemplazo de Ignacio Saavedra. El estratega charrúa buscaba algo de frescura en mediocampo en los pasajes finales del partido. 

La franja acorraló al Verdao en la recta final del encuentro, sin embargo, el gol del empate nunca llegó y el árbitro dio el pitazo final a los 90+4, desatando la desazón de los precordilleranos.

Universidad Católica y Palmeiras jugarán revancha de octavos y el ansiado paso a cuartos de final de Copa Libertadores el próximo miércoles 21 de julio a las 18:15 horas, en el Allianz Parque de Brasil.