Borussia Dortmund vivió el día más amargo de su temporada. El cuadro alemán saltó a la última fecha de la Bundesliga con la chance del título en sus pies: sólo debía ganarle al Mainz para cononarse como el nuevo campeón germano y quitarle así el reinado al Bayern Múnich.
Pero no pudo. Sacó apenas un empate y, paralelamente, los bávaros vencieron a Colonia por 2-1. Bayern alcanzó al Dortmund en la punta de la tabla de posiciones, pero la diferencia de gol (+54 vs +39) los favoreció para proclamarse campeones por undécima temporada consecutiva.
La desolación negriamarilla fue total. Con el pitazo final, pasados los seis minutos de descuentos, los jugadores se tiraron al suelo ante un repleto y entristecido Signal Iduna Park, que tenía a miles de hinchas que esperaban ver a su equipo campeón en su propia casa.
Una de las imágenes más tristes fue la de Jude Bellingham, quien ni siquiera ingresó al partido. El inglés se mantuvo apoyando al equipo desde la banca de suplentes por todo el encuentro, pero se deshizo en lágrimas una vez finalizó.
El entrenador negriamarillo, Edin Terzic, lo fue a consolar al campo de juego, pero poco pudo hacer. El inglés de 19 años, titular en la mayoría de la temporada, no pudo ayudar a su equipo a dar el último paso por culpa de una molestia en su rodilla derecha.
Para Bellingham, es la despedida al equipo al que llegó a inicios de 2022. La prensa española, específicamente el diario Marca, ya lo adelantó: el seleccionado inglés jugará la próxima temporada en el Real Madrid, algo que se hará oficial dentro de los siguientes días.
