Lionel Messi se adjudicó su séptimo Balón de Oro el pasado lunes, sin embargo, el crack de Paris Saint-Germain dejó en claro que su mayor premio es su familia, y así lo demostró haciendo respetar frente a todos el lugar de su esposa, Antonela Roccuzzo.

El ídolo trasandino llegó a la alfombra roja del evento realizado por France Football junto a su mujer y sus tres hijos; Thiago, Mateo y Ciro, quienes vistieron trajes de gala idénticos al de La Pulga.

Al arribar a la ceremonia Messi posó con su familia para los medios y fotógrafos presentes, esbozando una gran sonrisa a sabiendas de ser uno de los favoritos para quedarse con el galardón.

Sin embargo las risitas pasaron a ceño fruncido cuando uno de los directores de France Football explícitamente le ordenó a Antonela Roccuzzo hacerse a un lado para poder tomar fotos de Lionel solo.

La mujer no protestó y rápidamente se corrió del lado de su marido, pero Lio Messi reaccionó, se puso la diez e hizo respetar de una el lugar de su esposa.

El artillero del PSG frenó al hombre poniéndole una mano firme en el cuerpo y mirando con evidente molestia tras la petición, para luego girarse y pedirle a Roccuzzo que regresara a su lado.

Antonela sonrió y regresó al lado de su esposo e hijos para seguir posando alegremente en la antesala del evento.

“¡Le piden a Anto que se ponga a un costado para sacarle fotos a Messi solo y él le pide a ella que se quede a su lado! Por Dios, qué hombre. No esperen menos, reinas”, escribió una tuitera.

Por supuesto que la actitud de Lionel Messi no tardó en viralizarse sacando aplausos entre los internautas, que vieron cómo el campeón de la Copa América sacó las garras por su mujer e hizo valer su lugar sin importarle los protocolos.