No queda nada. Apenas cinco días faltan para que comience el Mundial de Qatar 2022, y las 32 selecciones clasificadas ya ajustan los últimos detalles para ir a pelear por el anhelado trofeo. Tras oficializarse todas las nóminas, los equipos ya han tenido sus primeras prácticas y, bajo ese contexto, recientemente el equipo de Portugal dio la vuelta al mundo por un controvertido saludo entre Cristiano Ronaldo y Bruno Fernandes.

Tras sus incendiarias declaraciones sobre su situación en el Manchester United, el legendario delantero portugués se encontró con el mediocampista, con quien es compañero en los Diablos Rojos, en el camarín del equipo que dirige Fernando Santos previo a un entrenamiento y su apretón de manos despertó las sospechas del mundo entero en redes sociales.

Más frío que en Alaska

Fernandes ingresó al vestuario de los lusos chocando el puño con el camarógrafo que lo grababa, pero al momento de toparse con CR7 la temperatura bajó considerablemente. El mediocampista de 28 años le tocó el brazo como pidiéndole permiso para pasar, y el goleador histórico del Real Madrid lo quedó mirando con una seriedad terrorífica y le estiró la mano para saludarlo.

El volante intentó hacerse el loco y con una sonrisa forzada salió del paso, pero el rostro de Cristiano no cambiaba mientras lo miraba fijamente al momento de estrechar sus manos. Una situación que generó una ola de reacciones a lo largo de todo el orbe, pero que causa pánico en los fanáticos portugueses a cinco días de que arranque la Copa del Mundo de la FIFA.

Tras el tremendo revuelo que generaron las imágenes, desde la "Selecção das Quinas" tuvieron que sacar la voz. Así, el volante João Mario alzó la voz y contó la realidad detrás de todo, enviando un mensaje de tranquilidad.

En conferencia de prensa, el jugador del Benfica explicó que “estaba feliz de estar en el vestuario en ese momento y vi las imágenes. Es gracioso, porque a veces puede ser problema de interpretación. Fue una broma entre ellos porque curiosamente Bruno fue uno de los últimos en llegar (a la concentración) y Cristiano le preguntó si había venido en barco. Puedo entender que las imágenes pueden estar sujetas a interpretación pero eso fue lo que pasó”.

“Fue una broma y estoy convencido de que tienen una muy buena relación porque juegan juntos, y porque los vi antes y los volví a ver. Todo el día de ayer se vio un pedacito de lo que pasó pero no hay problema entre ellos”, complementó para cerrar.

Así, ahora Portugal se sigue preparando para Qatar 2022. Este jueves 17 de noviembre jugarán un amistoso contra Nigeria en Lisboa, para después trasladarse a Medio Oriente. Ahí, los lusos son parte del Grupo H junto a Ghana, Uruguay y Corea del Sur. Los dirigidos por Fernando Santos debutarán el jueves 24 ante los africanos, desde las 13:00 horas en el Estadio 974.