El presente de Cobreloa es un gran signo de interrogación. Tras la goleada ante Deportes Copiapó en la final de la liguilla por el ascenso, que sepultó el sueño naranja de regresar a Primera División, la interna de todo el club quedó en standby a la espera de decisiones que pueden ser radicales.

En agosto pasado, el presidente loíno, Fernando Ramírez, reconoció que las deudas tenían al cuadro naranja “al borde” de la quiebra. Por eso, el club realizó numerosas activaciones y campañas para elevar sus ingresos vía abonos o socios: más de dos mil se sumaron en la semana anterior a la final con los copiapinos.

Ramírez no confirmaba que el equipo llegara a fin de año. “Es difícil, pero tengo la fe y la convicción de que si seguimos trabajando y aumentando este tipo de campañas, la situación va a cambiar a fin de año y la lograremos superar”, aventuraba hace casi cuatro meses. Por eso, el ascenso era casi de vida o muerte para los naranjas.

Las deudas que deja el frustrado ascenso de Cobreloa

La molestia dirigencial fue evidente y quedó de manifesto cuando después del partido, el presidente de Cobreloa Fernando Ramírez pasó delante dela prensa local. Inmediatamente los comentarios de indisciplinas en el plantel y una mala evaluación del técnico Emiliano Astorga comenzaron a hacer nata en Calama.

En ese sentido, el gerente técnico de los Zorros, el ex mundialista Óscar Wirth, dialogó con Redgol y reconoció que “cuando pasan estas cosas, mucha gente pierde la cordura y habla más de lo que corresponde. Uno tiene que hablar desde la tranquilidad, que es la única manera de poder darse cuenta de lo que estuvo bien o mal”.

Ese balance será en los próximos días, cuando el timonel naranja regrese de participar en el Consejo de Presidentes de la ANFP. ¿Seguirá Astorga? Tiene contrato vigente, pero ya hubo sondeos de O’Higgins de Rancagua. De los veteranos del plantel, sólo Maximiliano Velazco y David Escalante tienen contrato por el próximo año.

El resto será un picadillo de canteranos, pero también cabe la posibilidad que ante la falta de recursos, los Zorros deban deshacerse de los valores jóvenes que tuvieron un buen año, como Jorge Espejo, Axl Ríos, Nicolás Palma y Nicolás Orrego. Es decir, Cobreloa tendrá menos de dos meses para rehacer una plantilla competitiva que persevere en el objetivo del ascenso.