Deportes La Serena vive días complicados. Los papayeros vienen de recibir una goleada de Universidad Católica, la que los mantuvo en la parta baja de la tabla de posiciones y todavía ubicados en zona de descenso directo.

Y el elenco de la cuarta región no solo se complica con lo deportivo. Según detalla el diario regional El Día, los ánimos están más que convulsionados en el camarín serenense, con un jugadores borrados y una última discusión entre varios referentes. 

El citado medio pone al distancimiento entre Leonardo Valencia y el entrenador del equipo, Pablo Marini, como punto de partida en el "quiebre" del camarín papayero. "Las distancias se fueron acrecentando con el pase de las fechas hasta que el futbolista, quien no estaría lesionado, dejó simplemente de estar en las convocatorias", escribe.

"El jefe tomó la decisión de no incluir al atacante y este, poco dado a ceder, no hace mucho para estar en la cancha. Todo indica que perdió el interés de jugar bajo la tutela de Marini y defender a los papayeros desde que se frustró una posible partida al extranjero a mitad de año", continua.

El medio agrega que "producto de sus decisiones, el técnico se fue distanciando del resto de la plantilla, ya que Marini los hace pagar duramente sus errores y equivocaciones" y el técnico "simplemente borra del mapa a quien incurra en fallas, como acaba de ocurrir con el capitán Rodrigo Brito".

"En la administración serenense tienen claro que el vínculo de los jugadores con el entrenador ya no encontró un punto de equilibrio y las distancias entre los propios compañeros se ha ido agudizando", añade, citando en específico una "masiva discusión" entre varios referentes después de la goleada de la UC.

Con todo eso en mente, La Serena viaja a Santiago para visitar a Unión Española. Los papayeros llegan a la capital con la urgencia de sumar y salir del fondo de la tabla de posiciones, donde también está su vecino, Coquimbo Unido.

Los papayeros vienen de recibir una goleada en casa | Agencia UNO

Los papayeros vienen de recibir una goleada en casa | Agencia UNO