Arturo Vidal da su propia nota en el encuentro que Barcelona le gana a Alavés por 4-0, en el término de La Liga de España. El chileno ya protagonizado un curioso cambio de posición en un partido prácticamente resuelto en lo competitivo.
El futbolista chileno pasó a jugar como defensor central a partir de la lesión que sufrió a comienzos del segundo tiempo Clemént Lenglet, quien integraba la línea defensiva con el uruguayo Ronald Araujo en ausencia de Gerard Piqué por suspensión.
Mientras el francés se encontraba fuera de la cancha, el entrenador Quique Setién advertía que no tenía defensores para echar mano en la banca, ya que Barcelona se presentó con una delegación mínima para privilegiar el playoff de ascenso a Segunda División.
Posteriormente ingresó Nelson Semedo por el lesionado Lenglet, pero Vidal no volvió a la zona media, sino que se quedó en el centro de la zaga, ya participando de manera contínua en el juego defensivo.
Sergi Roberto pasó a reconstituir la línea media con Sergio Busquets y Rique Puig. ¿La razón? Setién quiere minutos como volante para Sergi, ya que ante Napoli por la Champions League no podrá contar precisamente por Vidal y Busquets.
