Los offside milimétricos fueron, en los últimos años, los grandes responsables de quitarnos el grito de gol. La irrupción del VAR hizo que esta regla, casi siempre pitada muy al límite, se cobrara casi de manera automática gracias a la tecnología.
Sin embargo, la situación para los más románticos de la actividad fue demasiado lejos, ya que se hicieron famosos goles que literalmente se anularon porque el dedo chico del pie del delantero estaba adelantado respecto a su defensor.
Eso hasta ahora, ya que la FIFA tiene planeado aplicar la “Ley Wenger” para los fuera de juego, iniciando su marcha blanca en Suecia, Italia y Países Bajos, esto con el objetivo de cambiar el modo en que se cobran los offside.
¿Por qué Ley Wenger? Pues porque se plateó por el mítico Arsène Wenger, ex entrenador del Arsenal de Inglaterra, quien hace algunos años presentó cambios reglamentarios que, según su opinión, mejoraría el fútbol.
El francés, quien también es miembro de la International Football Association Board (organismo que reglamenta las leyes del fútbol), señaló en torno al offside en ese entonces que “siempre que una parte del cuerpo de un atacante (con la que esté permitido marcar un gol) esté en línea con la del penúltimo defensor, estará habilitado. No es necesario que el cuerpo de dicho atacante se encuentre íntegramente por detrás de dicha línea. Esto obligaría a los defensores a salir más del fondo de la cancha”.
Esto va completamente contrario a lo que actualmente rige este cobro, ya que en su lógica inversa se consigna que si el futbolista del equipo que ataca tiene medio pie, cabeza o cuerpo por detrás de la línea del penúltimo jugador rival, estará en offside.
¿Cambia el fútbol con el nuevo fuera de juego?
“Dudamos un poco al principio, pero después sentimos que estaba bien, que debíamos participar de esto. Especialmente después de hablarlo con estas categorías, que están expuestas al experimento. Es divertido estar involucrado en algo así desde el principio. La FIFA nos lo vendió bien. Confían mucho en nuestro fútbol y saben que tenemos una buena organización”, señaló al respecto Per Widen, de la Federación de Suecia.
Por su parte Jonas Eriksson, árbitro internacional, declaró que “si esto lleva a un fútbol más atractivo como marca la visión de la FIFA, creo que se debería beneficiar a los atacantes, todos quieren eso. Será bueno. Habrá más goles, será divertido verlo. Todos quieren eso. Es bueno intentar participar en esto, probar y desarrollar”.
La FIFA, una vez terminada esta marcha blanca, analizará todos los partidos en los que se pruebe este nuevo formato y se entrevistará a los protagonistas para mejorarlo. ¿Se viene un nuevo cambio en el fútbol?