A estas alturas, nadie puede dudar de las destrezas de Manuel Pellegrini como entrenador. El técnico chileno celebró cien partidos al mando del Real Betis, con una victoria ante Elche y un registro de 51 victorias, el más alto en la historia del conjunto verdiblanco. Pero lo que no se conocía era su talento en el manejo del balón.

El Ingeniero tuvo una carrera positiva, con más de 400 partidos como un regular defensor de Universidad de Chile. Pero sus atributos técnicos parecían escondidos de la mayoría durante mucho tiempo, al punto que se ganó una ovación este lunes, cuando en pleno partido controló y "durmió" un balón que caía junto a la banca, con el pie izquierdo.

"¡El control de Manuel Pellegrini ha puesto de pie al (estadio) Benito Villamarín!", exclamó una reportera al borde del campo en la transmisión televisiva, que además dejó ver los aplausos que se ganó de la misma banca del cuadro andaluz, incluso sacándole una sonrisa a Claudio Bravo, que no alcanzó a estar inscrito para actuar en la primera jornada de La Liga.

Lo otro que manifiesta la acción es la concentración de Pellegrini en el partido. Diego González combinó de apuro con su arquero, Edgar Badía, quien despejó la pelota muy elevada y fuera del campo. El útil cayó justo en el pie izquierdo de Pellegrini, que lo devolvió a sus jugadores para reponer el lateral y se llevó las manos al bolsillo para escuchar la ovación.

 

Betis comenzó con el pie derecho su participación en La Liga, pues pese a que no pudo contar con once jugadores de su plantel profesional, producto de las restricciones financieras que se imponen en el fútbol de ese país para mantener el equilibrio económico de sus equipos.

Con todo, el conjunto verdiblanco se llevó una sólida victoria por 3-0, con goles de Borja Iglesias (28') y Juanmi (30' y 60'), en un choque donde el Elche se vio muy de capa caída y sufrió la temprana expulsión de John Nwankwo, además de la floja actuación de Enzo Roco, que cometió un grosero error en el segundo tanto del elenco andaluz.