La Copa Libertadores de América se quedó en Chile en 1991, cuando Colo Colo derrotó en la final a Olimpia en el estadio Monumental, y nunca más dicho torneo fue ganado por un club nacional.
Pero antes de ese partido, hubo una polémica semifinal, entre los albos y Boca Juniors, con un ambiente caliente y una pelea dura en el recinto de Macul.
Unos de los protagonistas de aquel duelo fue Rubén Espinoza, quien en contacto con RedGol entregó detalles de la conocida como “guerra de Santiago”.
“Tras el gol de Rubén Martínez yo estaba calmando… Al Pato (Yáñez) le llegaron varios de Boca encima, el Coca (Mendoza) fue a calmar, y el Pato llegó de atrás como a echar la ‘choreada’, a intentar pelear, pero si te pones a pelear con ellos tras hacer ese gol los más perjudicados éramos nosotros. En ese momento teníamos la cabeza fría varios, como el Chano Garrido, Daniel Morón, Jaime Pizarro, quienes empezamos a separar, a llevar a los jugadores a la mitad de la cancha; pero veíamos que el Coca y el Pato Yañez estaban al otro lado, y fue ahí cuando nos preocupamos, lo llamamos, pero estaba en la otra parte de la cancha”, recordó el ex volante.
La historia siguió: “luego lo fuimos a buscar para poder juntarnos y separarnos de la pelea, porque nosotros no teníamos nada que ver en este tema, fuimos testigos presenciales de lo que pasó con los fotógrafos, de la manera en que ellos insultaban, que era impresionante, pero ese insulto era de impotencia de verse en desventaja definitiva y no pasar a la final como ellos querían, porque ellos estaban seguros que clasificaban y nos ganaban en el Monumental”.
Pero eso no fue todo, porque Espinoza echó al agua a Yáñez, ahora comentarista de Deportes en Agricultura: “nosotros estábamos más preocupados de calmar al Pato, que hizo el amague de pelear, pero la verdad de las cosas es que se fue en el amague nomás… y el Coca que recibió un derechazo o un izquierdazo por ahí, y luego nos fuimos a la mitad de la cancha, para así olvidarnos que nosotros estábamos metidos en el tema trifulca”.
La marca de Blas Giunta
Espinoza tuvo una dura tarea ante Boca en el Monumental, porque le tocó marcar a uno de los jugadores más duros de los argentinos, Blas Giunta, con quien se dieron de todo.
“Fue un partido trabado, de mucha pierna fuerte, y de mucho hablar, porque ellos tienen cualidad y te llevan al terreno de ellos con las palabras, te empiezan a opacar, a aminorar, a achicar. La cantidad de chuchadas, de combos, de codazos… Yo tenía una marca con Blas Giunta, no era marca individual, pero mi responsabilidad era marcarlo cuando no tenía el balón, y cuando lo tenía, él era el encargado de tomarme a mí, era una cantidad de groserías, de combos… ese sí que fue un partido de Copa Libertadores”, rememoró Espinoza.
Colo Colo finalmente ganó la serie y la Copa, haciendo historia hace 29 años.
