Huachipato dio la gran sorpresa y logró ganar su tercera corona de su historia. Los acereros vencieron por 2-0 a Audax Italiano y con ello, aprovechando la caída de Cobresal por 1-0 ante Unión Española, alcanzaron una corona que se veía como muy complicada por la combinación de resultados que debían darse.
El equipo de Gustavo Álvarez, de esta forma, cierra una campaña excepcional, alcanzando 57 puntos, con un rendimiento del 63,3% y que fue cimentada, a diferencia de otras ocasiones, principalmente de visita, donde sumó 29 puntos en total, gracias a 9 triunfos, dos empates y cuatro derrotas.
Una ruta a la corona que comenzó de la mejor forma, sumando un triunfo por 3-1 ante Universidad de Chile en el Santa Laura. Los goles de Javier Altamirano, Cris Martínez y Maximiliano Rodríguez configuraron el primer gran golpe de autoridad para los acereros.
Un triunfo que vendría acompañado de otro con vital repercusión en el torneo. En la fecha 2, en el CAP, vencieron por 2-1 a Cobresal. Cris Martínez y Antonio Castillo permitieron sumar tres unidades que, si bien en ese momento se veían como un triunfo más, terminó tratándose de una verdadera final.
Fueron cuatro victorias seguidas las del campeón y tras ello, vendría la primera caída, ante Palestino en La Cisterna. Un 2-1 del que se levantaron rápido, sumando otras dos victorias ante Curicó Unido de visita y Everton en condición de local.
Pero vino Colo Colo y en el CAP no pudieron. Un 1-0 con el que pusieron los pies en la tierra y que les demostró que debían pelear si querían ser realmente candidatos al título. Y fechas después, consiguieron otra victoria clave, ante Universidad Católica en el Santa Laura, por 2-1.
Un brutal envión final
Terminaron la primera mitad del torneo como campeones de invierno, sumando 29 puntos y demostrando que estaban para pelear. Pero el reinicio no fue sencillo, cayeron ante la U por 2-1 en el CAP y llegaron las dudas. Javier Altamirano había partido al fútbol argentino y el equipo parecía perdido.
Fueron tres derrotas en cuatro partidos que complicaron sus chances, pero vino el envión final. Fueron once partidos en los que Huachipato no supo de derrotas, incluyendo siete triunfos y cuatro empates. Unidades claves que le permitieron alcanzar a un Cobresal, que tras ese reinicio de la segunda rueda, aparecía como favorito.
Ante Unión Española, Curicó Unido, Everton, Copiapó, Calera, Ñublense y Audax, además de igualdades ante Coquimbo, Palestino, Magallanes y Católica, le dieron al equipo acerero la chance de celebrar una histórica conquista, transformándose en el primer campeón de regiones en torneos largos desde Wanderers en 2001.
¿Es Huachipato un justo campeón?
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