Everton y Santiago Wanderers se enfrentan en el clásico por la fecha 14 del Torneo Nacional, en el estadio Sausalito. Poco antes de terminar el primer tiempo se vivió una curiosa situación.
Con los viñamarinos en ventaja parcial de 1-0, uno de los pasapelotas se tomó con mucha calma su labor y devolvió el balón con tranquilidad inquietante antes que pudiera seguir el juego.
El DT de Wanderers, Miguel Ramírez, estalló ante la situación y le alegó con todo al árbitro Juan Lara, argumentando que el juvenil de los ruleteros se estaba aprovechando adrede para hacer tiempo y favorecer a Everton.
Y como la situación era hilarante, el CDF no tardó en enfocar al protagonista de la polémica: el joven pasapelotas de Everton disfrutaba tranquilamente del duelo sentado en una silla dispuesta al borde de la cancha.
Al árbitro Lara tampoco le gustó mucho la actitud del joven evertoniano, que se llevó el reto del juez. El pasapelota tuvo que retirar la silla y ponerla más atrás. Ya de pie, el réferi le exigió estar más atento.
