La infeliz estadística de Lionel Messi en la Champions League dice que su último título fue en 2015, en la recordada final en que Barcelona derrotó inapelablemente a la Juventus de Arturo Vidal, en el estadio Olímpico de Berlín. Pero nunca más La Pulga llegó a una final y vio por TV las cuatro orejonas del Real Madrid y las coronas de Liverpool, Bayern Múnich y Chelsea.
Por eso, los anti-Messi no tardaron en enrostrar los números del delantero argentino. Que más allá de su título en el Mundial de Qatar 2022, la verdadera competencia de los mejores jugadores del mundo es la Champions y que ahí, el trasandino sólo suma sinsabores, como la eliminación del PSG ante Bayern Múnich en octavos de final de la presente edición.
Los ocho fracasos de Messi en la Champions
El derrotero ha sido especialmente duro para Leo. En 2016, Atlético de Madrid condenó una Champions poco productiva del argentino (seis goles) y eliminó a Barcelona en octavos con doblete de Antoine Griezmann. Un año después y pese a una remontada histórica ante PSG en octavos (6-1 en la revancha), terminó apeado por la Juventus en cuartos (3-0 global).
En 2018 vino otra sorpresota. Barcelona ganó 4-1 la ida de cuartos ante la Roma, pero perdió increíblemente 3-0 en el Olímpico de la capital italiana. Messi terminó desagradado al frente de un equipo "indigno" según la prensa internacional. Y si eso no fue suficiente, lo de 2019 da para capítulo aparte y sentenció el inicio del adiós de La Pulga del Barça.
Messi apareció nuevamente en su mejor versión. De hecho, finalmente le quitó el puesto de goleador de la Champions a Cristiano Ronaldo. Pero el Barcelona se confió de una victoria demasiado holgada sobre Liverpool en Nou Camp (3-0) y se regaló en Anfield Road para permitir la remontada más increíble de la historia de la Champions.
El cuadro de Jürgen Klopp empató la serie de semifinales con un doblete de Georginio Wijnaldum en el segundo tiempo ante un apático elenco catalán. No bastó el músculo de Arturo Vidal y una jugada de barrio entre Trent Alexander-Arnold y Divock Origi puso por delante al Liverpool en una noche inolvidable.
La gran vergüenza del Barça en pandemia
Las restricciones producto de la pandemia determinaron que el título de la Champions League 2019/2020 se definiera en un torneo de muerte súbita que se disputó en Lisboa. Y fue escenario de la derrota más dura para el Barcelona, con un Lionel Messi prácticamente ausente: el 8-2 ante Bayern Múnich en cuartos de final.
Un año después se repitió el desagrado, esta vez a puertas cerradas contra el PSG en octavos de final. Los franceses golearon en el Nou Camp con triplete de Kylian Mbappé y sentenciaron el fin de la era azulgrana de Leo. Curiosamente, el técnico de Barcelona, Ronald Koeman, había anticipado el fracaso semanas antes: "No estamos para ganar muchas cosas".
PSG, que había perdido la final contra Bayern, se despidió en semis ante Manchester City. Pero se gastó todo el oro del mundo para incorporar a Lionel Messi en una operación histórica, que reunió al argentino con Kylian Mbappé y Neymar. La fórmula millonaria le dio al cuadro francés todo el favoritismo, pero La Pulga no pudo sacudirse la modorra.
Messi tampoco puede en el PSG
Las últimas dos ediciones de la Liga de Campeones dan cuenta de que no basta solamente con la capacidad financiera. En 2022, Real Madrid sacó toda su raza para remontar la llave de octavos en París, pese a un primer triunfo de PSG en el Bernabéu con gol de Mbappé. Un triplete de Karim Benzemá en la vuelta dejó nuevamente a Messi a la vera del camino.
Y este año, lo que todos vieron. La lesión de Neymar obligó a que el PSG actuara con solo dos delanteros y que tanto Mbappé como Messi apenas pudieran entrar en contacto con el balón. Demasiado Bayern para un cuadro parisino desangelado que nuevamente vio como La Pulga quedaba tempranamente fuera de competencia.
