Universidad Católica clasificó a cuartos de final de la Copa Sudamericana pero quedó con un sabor amargo: perdió con River Plate de Montevideo y terminó pasando más sustos de los que se preveían tras el triunfo en Uruguay.
La Franja se vio con un equipo algo cortado y en el primer tiempo lo más peligroso que generó fue un gol anulado a Fernando Zampedri por posición de adelanto a los 18 minutos.
La visita empezó a pegar rápidamente y así fue registrando algunas amarillas que luego tendrían repercusión en el complemento. Y justo cuando el equipo de Jorge Fossati iba a buscar el botín completo en San Carlos de Apoquindo.
Así, a los 50’ llegó un signo de interrogación que no parecía que se iba a hacer presente: se mandó por derecha Maximiliano Calzada, definió, Matías Dituro la sacó con una pierna pero le quedó a Facundo Bonizafi, quien definió con el arco de frente.
River se armaba de coraje pero recibió un baldazo de agua fría casi de inmediato: en la jugada siguiente, expulsaron a Sebastián Píriz por doble amarilla y se quedaron con un hombre menos para intentar la hazaña cuando aún faltaban largos 40 minutos para el final.
A la UC le costeó sortear el juego de roce de los charrúas y se fue enredando. Para colmo de males, se lesionó Germán Lanaro, ingresó Tomás Asta-Buruaga y el ex Club Deportes Antofagasta también tuvo que salir por una lesión y fue reemplazado viéndose muy triste, con las manos en la cara y siendo apoyado por sus compañeros.
A los ponchazos, River Plate de Uruguay hizo pasar algún susto a la UC arrinconándola con algunos tiros de esquina que, finalmente, no le alcanzaron.
Dudas para el equipo de Ariel Holan pero, pese a todo, con el 1-2 en Montevideo clasificó a cuartos de final de la Copa Sudamericana. Ahora enfrentará a Vélez Sarsfield de inmediato, con el partido de ida la semana entrante y la vuelta la subsiguiente en horarios aún por definir. Y, de paso, se verá las caras con Universidad de Chile en el Clásico Universitario el domingo en el Campeonato Nacional.
