La imagen quedó para la posteridad. Joan Cruz dejó la cancha del estadio Bezerrao de Brasilia al ser reemplazado por César Pérez, y el público brasileño le regaló una ovación cuando salía del césped.

Fue el resultado de una noche mágica pero incompleta. El mediocampista anotó dos goles pero no pudo hacer la diferencia para derrotar a Brasil en su casa, en los octavos de final del Mundial Sub 17. La eliminación fue demasiado castigo.

“No se pudo pero lo dimos todo.Esas son experiencias, recién estamos iniciando (las carreras) y a prepararnos para lo que viene. Queda mucho todavía”, reflexionó el goleador después de la derrota.

“Fuimos valientes en todos los partidos y ahora a levantarse nomás. Nos fuimos con todo y no se pudo”, destacó el jugador de Colo Colo, quien agradeció el aplauso del público local.

“Fue maravilloso, una sensación que nunca había sentido”, sentenció Cruz.