La final de Europa League partió con todo. Luego de la apertura de la cuenta por parte de Romelu Lukaku para el Inter, Luuk de Jong le dio respiro al Sevilla y puso el empate.

Tras el 1-0, el elenco español se fue con todo en busca de la portería rival. Centros que no llegaban a buen punto comenzaron a incomodar, pero fue el neerlandés el que instaló la calma.

En el minuto 11, una jugada asociada terminó con Jesús Navas encarando por la banda derecha y metiendo un centro que encontró en el área a De Jong. Ganando la posición, logró meter la cabeza con una tremenda palomita y batir a Handanovic.