Las controvertidas decisiones de la FIFA y la organización de la próxima Copa del Mundo nuevamente han quedado al descubierto después de una cumbre internacional entre el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, emir de Qatar, y el presidente de Rusia, Vladimir Putin; que se desarrolló este jueves en Kazajastán.

Pese a que el mundo del fútbol le cerró la puerta a Rusia y la FIFA determinó la expulsión de la selección eslava de las eliminatorias para el Mundial de Qatar, a partir de la guerra contra Ucrania; las autoridades políticas del emirato parecen en otra sintonía. A un mes de la magna cita, el encuentro con Putin ha sido rápidamente rechazado por occidente.

Pero más aún después de que se conocieran las palabras del emir, quien explícitamente reconoció el aporte de Rusia en la organización del Mundial y adelantó que su aporte a Qatar se extiende más allá de las sanciones de la FIFA, que fueron comunicadas oficialmente el 22 de febrero pasado.

Según el reporte de prensa de la oficina del Kremlin, la autoridad catarí fue explícita en señalar el reconocimiento al aporte de los rusos. "Quisiera agradecerle, señor Presidente, el éxito que acompañó a Rusia durante la preparación y realización de la Copa del Mundo 2018. Esta es una ayuda significativa para Qatar", puntualizó.

"Nuestro país (Qatar) saca experiencia en la preparación para la Copa del Mundo. Muchas gracias por su ayuda en la preparación para el próximo campeonato. El trabajo continuará, la coordinación continuará hasta la realización de este evento deportivo", valoró el emir en el encuentro realizado en Astana.

Putin no se quedó en eso y devolvió gentilezas, pero con un dato que no estaba en los planes: la presencia de los hinchas rusos en Qatar 2022, más allá de las restricciones y la posibilidad de que se generen focos de conflicto. "Gracias por organizar y crear una zona de aficionados para los hinchas rusos", expresó el controvertido timonel.

 

 

Tanto el encuentro entre los líderes como los dichos expresados alteraron rápidamente a la prensa internacional, que comenzó a pedir explicaciones a la FIFA. La presentadora británica Georgie Bingham ironizó con su mensaje en Twitter, "¡Hurra por Qatar! ¡Hurra por Rusia! ¡Hurra por FIFA!", decorado con emojis de vómito.

El inglés Rob Harris, de Sky News, también hizo sus descargos: "Rusia ayuda a Qatar a preparar la Copa del Mundo. A Rusia se le prohibió participar en las eliminatorias en febrero, pero la Federación Rusa de Fútbol no está castigada, así que cooperar en el Mundial no representa ninguna infracción".