Casi 40 mil personas llegaron el domingo pasado al Estadio Monumental. La chance era única: si Colo Colo lograba un triunfo ante su escolta, Curicó Unido, los albos levantarían su trofeo número 33 y darían la vuelta olímpica en su casa.
Pero la tarde terminó amarga para el Cacique. Los torteros se hicieron fuertesy sacaron un empate 1-1 en Macul, estirando la espera alba por el título. Pero no solo ellos empañaron la tarde en Macul, pues un informe arbitral también complica al elenco popular.
Julio Bascuñán, quien pitó el encuentro entre curicanos y albos, consignó diversas conductas de la hinchada colocolina como lanzamiento de fuegos artificiales, detonación deuna bombade estruendo e incluso la caída de bengalas en la misma cancha.
“Se lanzan fuegos artificiales desde la parcialidad del equipo local en la salida de los equipos“, parte diciendo el escrito. “Además en el minuto 90+2 caen dos bengalas al campo de juego lanzados desde el sector Arica del estadio“, complementa.
“En el minuto 43-67-85 se observan bengalas en el sector Arica. En el minuto 90+1 se escucha una bomba de estruendo al aire desde el sector Magallanes del estadio“, dice después.
La presencia de bombas de estruendo y bengalas ya había sido comunicada por Roberto Tobar, quien el martes pasado arbitró aColo Colo y Universidad Católicaen el mismo estadio. Una situación complicada para el Cacique, que quedará atento a lo que diga el Tribunal de Disciplina.
A falta de tres fechas para que finalice el Campeonato Nacional, los albos tienen solo un partido restante en su casa. El 30 de octubre, Colo Colo recibirá a O’Higgins por la penúltima jornada del torneo, a la que pueden llegar como campeones si suman ante Coquimbo Unido.
