La violencia está desatada en el fútbol chileno, y ya sinceramente no hay nada que no se haya dicho para intentar ponerle punto final a un problema que se convierte en pandemia y enferma el corazón del balompié criollo. Por eso, Pablo Milad propone varias medidas para de una vez por todas ponerle la lápida a los delincuentes disfrazados de hinchas.

El presidente de la ANFP sacó la voz después del último episodio que avergüenza a los verdaderos fanáticos de la pelota, la triste suspensión del Clásico Universitario 196 en Concepción, y detalló algunas propuestas que buscará implementar como timonel del ente rector de nuestro fútbol para acabar con la violencia en los estadios.

 

"Una de las medidas que debemos empujar como fútbol chileno, es integrar a los sistemas de control de acceso a todos aquellos que estén con prohibiciones legales vigentes, es decir que todo delincuente que esté con causas y en el sistema judicial con orden de detención", detalló Milad de entrada.

Tras eso, destaca que "así estas personas no pueden entrar a los estadios. Debería generarse un nuevo código, ya que actualmente está el 101 que es de prohibiciones judiciales del fútbol y el 102 del derecho de admisión, así se puede agregar este que va enfocado de personas buscadas o con temas pendientes con la autoridad".

Después, añade que también "se tiene que retomar el registro nacional de hinchas, y tener el apoyo del Registro Civil para tener toda la información y poder activar el reconocimiento facial, de tal manera que la búsqueda sea más rápida y efectiva por parte de nuestras policías".

Los jugadores miran incrédulos como los delincuentes se roban el fútbol chileno. | Foto: Photosport

Los jugadores miran incrédulos como los delincuentes se roban el fútbol chileno. | Foto: Photosport

Para ir cerrando, detalla la necesidad de "trabajar en la modificación de la norma de la ley para que cualquier persona que realice acciones como el lanzamiento de objetos contundentes o la utilización de fuegos artificiales, que no sea solo una falta sino que sea considerado como uno delito y sacar de raíz la sensación de impunidad que hoy hay en nuestros estadios".

 

"También se requiere un trabajo en la normativa a través del ministerio del interior, para cambiar en la preparación y calificación de la seguridad privada, hay que tener mayores alternativas de control de los hinchas al interior del estadio", concluyó.