Harold Mayne-Nicholls no se va del campo de batalla. El candidato perdedor de las últimas elecciones de la ANFP hizo hoy un llamado para que se tramite una reforma a la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas que permita mayor conocimientos sobre sus actuales inversores, especialmente cuando los fondos provienen del exterior.

"Puede ser que el fútbol chileno termine con 32 presidentes o dueños extranjeros. Y no lo digo por un excesivo nacionalismo ni nada por el estilo", alertó el ex funcionario FIFA, hoy al mando de la Fundación Ganamos Todos, en entrevista con El Mercurio de Valparaíso.

 

Según Mayne Nicholls, la fórmula actual impide que se haga un mejor control: "Los dueños extranjeros pueden elegir a un extranjero como presidente de la ANFP, quien a su vez elegirá al entrenador de la selección. Este es un tema que, de una u otra manera, terminará causando ruido".

Por esta razón, pidió una reforma a la ley. "Tiene que poner algunos sistemas donde seamos capaces de pedir al menos un papel de antecedentes para saber quiénes son los dueños de los clubes y para saber si hay algo empresas relacionadas o algo por el estilo. La revisión de la ley debe ser urgente".

En ese sentido, el dirigente subrayó que "las cosas hay que verlas en su globalidad y es claro que la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas hace mucho tiempo que requiere un ajuste para ponerla de acuerdo a los tiempos".

 

Además, solicitó que se active un mecanismo para que "la comunidad que quiera recuperar un club lo pueda hacer, pero asumiendo responsabilidades reales". En este sentido, Harold Mayne-Nicholls explicitó que debe haber un compromiso de los hinchas y socios.

"No ganamos nada con que los socios tomen el control del club si vamos a caer en los mismos errores de antes, pero también hay ejemplos muy positivos, como los de Curicó, Puerto Montt, Cobresal o el mismo Concepción, donde los socios siguen siendo dueños del club y caminan bastante bien", completó el ex timonel del fútbol chileno.