Chile recibió a Colombia en el Estadio Nacional por la segunda fecha de las eliminatorias rumbo a Qatar 2022 con una misión: ganar tras lo que le pasó ante Uruguay en el Centenario, donde bien se pudo traer uno o los tres puntos pero se vino con las manos vacías tras las decisiones arbitrales ya largamente discutidas.
Y el partido comenzó con todo para la visita, cuando antes del minuto sacó un centro Johan Mojica que cabeceó Duván Zapata, pero se fue desviado. Era un aviso de lo que buscaría el cuadro cafetalero por aire.
De inmediato con testó la Roja: Arturo Vidal con Alexis Sánchez, de vuelta para el King, éste la jugó de zurda al corazón del área chica pero no se entendió con Eduardo Vargas y el balón pasó de largo sin que nadie la empujara.
Hasta que a los 6’ vendría el baldazo: quedó mal parado Chile tras una pérdida en salida de Sebastián Vegas, Stefan Medina sacó el centro y Jéfferson Lerma apareció solo para batir a Brayan Cortés con golpe de cabeza.
Chile no se encontraba y el propio Lerma pudo aumentar a los 23’ con un bombazo que desactivó Cortés, pero los históricos tirarían para arriba al bicampeón de América partiendo a los 37’, cuando Arturo Vidal pinchó un balón en ofensiva, Jéfferson Lerma pasó de largo, le pegó al Rey y, vía VAR, el árbitro Darío Herrera cobró penal. El propio volante del Inter de Milán cambió por gol con un sablazo al ángulo.
Pero faltaba más: a los 40’, gran pase profundo de César Pinares para Mauricio Isla, éste sacó el centro y, tras una serie de rebotes, le quedó a Alexis Sánchez, quien se la picó a Camilo Vargas para darse un autopase y empujarla al fondo del arco y poner el 2-1 con el que se irían al descanso.
Café amargo
En el complemento, Chile se fue quedando poco a poco y Carlos Queiroz fue introduciendo cambios para ir, al menos, por el empate.
A los 62’, gol anulado a Colombia de Dávinson Sánchez por un empujón previo de Jéfferson Lerma a Mauricio Isla, aunque el autor del tanto también chocaba con Brayan Cortés.
Colombia comenzó a meter centro tras centro al área de Chile y uno le pudo costar caro al portero chileno, ya que chocó su cabeza con la de Murillo pero, afortunadamente, no pasó nada.
Estaba muy atrás Chile y lo pagó: minuto 90, pelota de flipper en el área, se barrió Claudio Baeza, la tocaba con la mano, reclamaron penal, la de volvieron con fuerza al área chica y con tremendo olfato, Radamel Falco García la mandó a guardar para el 2-2 que sería definitivo.
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Sabor amargo para Chile que termina esta primera fecha doble con un punto cuando dejó la sensación de que rozó los seis y el cartón completo. Ahora tiene que ir a recuperar unidades afuera y la siguiente fecha asoma para eso: el 12 de noviembre de local con Perú y el 17 del mismo ante Venezuela de visita.
