Novak Djokovic sigue con la polémica mundial por su determinación a no vacunarse contra el Covid-19, lo que ya le trajo consecuencias en Australia, donde no se le permitió participar del Grand Slam, incluso fue deportado del país anfitrión.

Por lo mismo, el número uno del mundo rompió el silencio en conversación con  la cadena británica BBC, donde negó haberse inoculado en los últimos días, no lo descartó a futuro, pese a que tiene sus dudas con el proceso: “Aunque tengo la mente abierta porque debemos encontrar una solución para acabar con el Covid”.

“No estoy en contra de la vacunación, pero mi cuerpo es más importante que cualquier título. Es el precio que estoy dispuesto a pagar. Yo defiendo la libertad de ponerme lo que quiera en mi cuerpo”, comentó Djokovic, teniendo en cuenta en que corre serio riesgo Roland Garros y Wimbledon, además de  los primeros Masters 1.000 de la temporada en Indian Wells y Miami.

En ese sentido, el tenista también se refirió a lo que sucedió en Australia, donde fue llevado a juicio y deportado, además que fue cuestionado mundialmente y por muchos de sus compañeros de circuito.

 “Me decepcionó mucho la manera cómo terminaron allí las cosas. No fue nada fácil afrontar esa situación”, finaliza.