La Fórmula 1 estuvo a punto de vivir una tragedia en el marco del Gran Premio de Bahrein, luego que el piloto de Haas, Romain Grosjean, saliera vivo entre llamas tras un terrible choque contra las barreras de seguridad.

El francés impactó directo en el guardarraíl a 221 kilómetros por hora, causando que su monoplaza se partiera en dos y estallara en llamas. Casi medio minuto tras la explosió, Grosjean salió caminando entre el fuego.

Eliseo Salazar, el único piloto chileno en llegar a la Fórmula 1, se refirió en Deportes en Agricultura al terrible accidente, donde contra todo pronóstico el profesional de Haas salió con vida:

"Afortunadamente estos accidentes sirven para buscar soluciones en el futuro. Esta era una imagen propia de los ’80 que la televisión no repitió porque se pensó que era más grave”, comentó Salazar agregando: “Esto es un recordatorio de que el automovilista no siempre será seguro. Tiene una parte de riesgo, va en su adn y se encarga de recordarlo".

Además, el ex piloto chileno se refirió a la utilidad del Halo, la pieza de titanio flexible que resiste el equivalente a 12 toneladas y que, literalmente, impidió que Grosjean terminara decapitado.

"Hoy en las pistas siempre hay una barrera de seguridad, pero en las rectas hay algunas que la FIA tendrán que cambiar. El halo le terminó salvando la vida. Se dieron un montón de condiciones para que esté vivo hoy", reflexionó Salazar.

Por increíble que parezca, Romain Grosjean resultó sin fracturas ni daños internos, y actualmente está internado para tratar las quemaduras en sus manos y tobillos, y según el reporte de su escudería, podría dejar el hospital durante la jornada de mañana.