Hablar de Paul Scholes, es hablar de Manchester United. La vida del inglés y el club han crecido de la mano, por lo que el Colorado es palabra autorizada para referirse al equipo de su vida.
Scholes fue el protagonista de la época más bella de los Diablos Rojos. Debutó en 1993 con Alex Ferguson como entrenador y se retiró en 2013, al mismo tiempo que el escocés dejó la banca del Teatro de los Sueños. Por esta razón, conoce al histórico DT como pocos.
El peor refuerzo según Paul Scholes
Durante los años que Paul Scholes y Sir Alex Ferguson trabajaron juntos en Manchester United, les pasó de todo. Ganaron 29 títulos, vieron a los mejores jugadores del mundo pasar por los Diablos Rojos, pero también vieron a otros que dejaron un recuerdo negativo.

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Conversando con Gary Neville en el programa The Overlap, Scholes habló del que considera el peor refuerzo de Manchester United bajo el mandato de Ferguson. ¿El nombre? Mark Bosnich. “Pensé que era un buen arquero, lo hizo bien en Aston Villa, pero cuando se unió a nosotros, me di cuenta que era muy poco profesional“, indicó el Colorado.
Bosnich era un portero australiano que arribó a Old Trafford en 1999, en reemplazo del legendario Peter Schmeichel. Sin embargo, el oceánico no dio la talla y solo jugó 35 partidos antes de irse en 2001 a Chelsea. Fue un desastre en Manchester.
“Honestamente, era ridículo. En los entrenamientos, uno patea entre 15 y 20 tiros a los arqueros. Después de 3, él ya estaba destrozado. Y, nunca me había dado cuenta, pero no podía patear una pelota. Nunca había visto algo como eso”, recordó Scholes.

Mark Bosnich no dejó una buena imagen en Manchester United. Imagen: Getty
En Chelsea la vida de Bosnich no mejoró demasiado, ya que en 2003 dio positivo por cocaína y fue sancionado con 9 meses sin jugar fútbol. Finalmente, el arquero terminó regresando a Australia, retirándose en 2009 en Sydney Olympic. Incluso, Paul Scholes recordó que el meta ni siquiera se podía la pelota.
“Jugamos contra Everton, el primer partido de la temporada, y ninguno de nosotros se había dado cuenta, pero no llegaba ni a mitad de cancha. Y no era por el viento, no había viento, era un día perfecto“, cerró la leyenda de Manchester United.