Wojciech Szczesny se vio mucho mejor finalizado el encuentro entre Juventus y Sporting Club de Lisboa por la ida de los cuartos de final de la Europa League, duelo disputado en el estadio Allianz de Turín. En los 40’ el arquero polaco del cuadro italiano evidenció mareos y se llevó la mano al pecho.

En medio de las alarmas por el estado de salud del portero, el DT Massimiliano Allegri dispuso de inmediato el cambio, ingresando en lugar de Szczesny el arquero Mattia Perin.

El mismo Szczesny habló tras el partido con la transmisión de Sky Sports mientras entrevistaban a Perin. “sentí un poco de ansiedad, algo que nunca me había pasado, también me costaba respirar, pero acabo de hacerme los controles y todo está bien”, dijo Szczesny.

El portero polaco de la Juventus agregó que “estoy bien, un poco ansioso pero acabo de hacer los controles y todo está bien. ¿Qué pasó? Miedo, algo que nunca antes me había pasado, me costaba hasta respirar. un poco de ansiedad y miedo, pero ahora estoy mucho mejor”.

¿Crisis de pánico?

Junto con las alentadoras palabras de Wojciech Szczesny sobre su salud, y probablemente a espera de otros exámenes de rigor más profundos, las mismas declaraciones del arquero de la Juventus dejan botando la explicación del tenso epidodio: ¿el meta sufrió una crisis de pánico durante el desarrollo del duelo contra Sporting?

Quien sufre o ha vivido crisis de pánico o trastorno de ansiedad sabe de lo que estamos hablando: episodios donde el corazón parece descontrolarse y miedo a que ocurra lo peor. Problemas para respirar, presión en el pecho, sensación de irrealidad, temblores y problemas para controlar el cuerpo. Terror. Todo con distintas intensidades, pero algo generalmente en común… la sensación de estar viviendo el propio momento de la muerte.

Estos episodios pueden ser puntuales o frecuentes, gatillados por diversos motivos. Lo cierto es que la terapia psicológica y psiquiátrica son los medios más recomendados para controlar esta condición metal que afecta a más personas de lo que se piensa. El profesional respectivo definirá tratamiento a través de técnicas psicológicas, meditación y/o medicamentos.

Y un dato a considerar: quienes sufren crisis de pánico y trastornos de ansiedad no exageran. Requieren del apoyo de sus cercanos y no el cuestionamiento por su condición, pues aquello que los afecta psicológicamente, y que repercute físicamente, simplemente está fuera de su control.