Pelear en la zona de descenso puede sentenciarte a perder la categoría o motivarte a sacar fuerzas de cualquier parte para seguir con vida. Este viernes el Genoa dio una muestra de ello, consiguiendo un agónico triunfo frente a la Juventus por 2-1 en la Serie A.

El equipo de Pablo Galdames no lo pasó bien dentro de la cancha, pero necesitó de unos últimos 10' minutos de oro para mantener viva la ilusión de salvarse. En un partido lleno de presión, el Grifo logró quedarse con tres puntos de oro y que pueden significar el mantenerse en la Primera División de Italia.

Con el volante chileno como titular, el Genoa mostró cosas pero no las suficientes para complicar a una Juventus que esperó para hacer daño. El trámite del primer tiempo se mantuvo en esa línea y no sería hasta el complemento cuando las cosas cambiarían.

El técnico Alexander Blessin movió el tablero y sacó a Pablo Galdames de la cancha, en una jugada que le terminó costando caro. La Vecchia Signora aprovechó que se estaban acomodando y se puso en ventaja gracias a Paulo Dybala.

Pablo Galdames estuvo presente en el triunfo del Genoa frente a la Juventus. Foto: Getty Images

Pablo Galdames estuvo presente en el triunfo del Genoa frente a la Juventus. Foto: Getty Images

El argentino recibió un pase cerca del límite del área y sacó un remate que se coló con lo justo dentro de la portería para poner el 0-1. El resultado era una estocada letal para el Genoa, pero llegaría el momento de dar vuelta la historia.

Una remontada agónica y que puede significar la salvación del descenso

Juventus tuvo chances para estirar su ventaja e incluso por poco le ceden un penal que, de no ser por el VAR, pudo sentenciar la suerte del Genoa. Esto ocurrió en el minuto 84' y permitiría que los locales despertaran con todo.

La alerta se instaló de inmediato y el Grifo se dio cuenta que no podía dejar escapar el triunfo. Fue así como en el 87' Albert Guomundsson quedó con la pelota servida dentro del área para rematar cruzado y poner el 1-1 que abrió el apetito.

Juventus intentó descontar, pero la mala tarde que tuvo Moise Kean le impidió celebrar. Así el partido entró en los descuentos hasta el 95', cuando Mattia De Sciglio cometió una torpe falta contra Kelvin Yeboah y el juez sancionó penal. Domenico Criscito se sacó la mufa y anotó el 2-1 que desató la locura en el estadio Luigi Ferraris y que cerró el encuentro.

Genoa consigue tres puntos que pueden valer oro y llega a 28 puntos, igualando al Cagliari en los dos últimos puestos de descenso. Ahora espera para que tanto Gli Isolani ni el Salernitana sumen puntos, lo que les permitiría pelear en las dos fechas que quedan su opción de mantener la categoría.

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