Ghana se metió en carrera para clasificar a los octavos de final de Qatar 2022. El cuadro africano, que había debutado con una derrota ante Portugal, pasó a vencer por 3-2 a Corea del Sur y se tomó el segundo puesto del Grupo H, quedando a una victoria de distancia para meterse en la siguiente fase del Mundial.

Por su lado, el cuadro asiático complicó sus chances: con apenas un punto -el que sacó en un empate sin goles ante Uruguay-, los surcoreanos pasaron al último lugar del Grupo H y, con un partido pendiente ante los lusos, ya no dependen de sí mismos para seguir en competencia.

Eso fue lo que ocasionó las lágrimas de Heung-min Son, las que fueron interrumpidas de manera bastante desconsiderada por su rival. Apenas sonó el pitazo final del enfrentamiento ante los ghaneses, el delantero que milita en el Tottenham se largó a llorar ante el panorama de su escuadra. Hasta ahí llegó el cuerpo técnico africano.

Mientras dos miembros del staff le ofrecían palabras de aliento a Son, un tercero -bastante más sin respeto que sus colegas- sacó su teléfono, abrió la cámara y posó a modo selfie con el desconsolado atacante surcoreano. Por lo menos, el integrante del CT fue reprochado por otro y rápidamente se retiró de la escena.

Son, por su lado, escondió su rostro al ver el celular del ghanés y también abandonó la pequeña reunión con los rivales. El registro del momento, captado por la transmisión oficial, fue tomado por varios usuarios de Twitter y TikTok, los que mostraron su asombro ante la poco atinada actitud del profesional.