Los talibanes son un movimiento político-religioso y una organización militar islamista de Afganistán. Existen desde 1994, sin embargo, a pesar de ofensivas anti-talibanes, en agosto del 2021 consiguieron ingresar a Kabul y restablecieron el Emirato Islámico de Afganistán, por consiguiente, establecieron una serie de prohibiciones especialmente para las mujeres. 

Los fundamentalistas religiosos volvieron a imponer su ley Sharía, órdenes que tienen consecuencias para los ciudadanos, pero principalmente para la vida de mujeres y niñas. Ellos mismo aseguran que con sus leyes pretenden "crear ambientes seguros donde la castidad y dignidad de las mujeres sean por fin, sacrosantas, tal y como recogen las creencias Pashtunes sobre la vida en purdah (práctica para ocultar la vida femenina en público)". 

El fotoperiodista Ebrahim Noroozi de la agencia Associated Press, retrató a mujeres con burka reivindicando una de las tantas restricciones para ellas: practicar deporte. Una de las imágenes publicadas por el diario El País, muestra a una mujer montando una bicicleta, un acto tan simple que está prohibido en Afganistán. Ni siquiera pueden asistir a parques o gimnasios. 

El fotoreportaje también cuenta con la imagen de una mujer que practica jiu jitsu. La deportista contó a la agencia AP que estaba compitiendo en un torneo femenino local cuando llegaron los talibanes a la capital. Comentó que se corrió la voz de la avanzada y que todas las mujeres y niñas huyeron del pabellón y que esa fue la última competencia a la que asistió. 

Varias jugadoras de fútbol han tenido que seguir entrenando escondidas. Noura es una de las futbolistas más jóvenes y comenzó jugando con los niños del barrio. A los nueve años se unió a un equipo femenino y lo mantuvo en secreto. A los 13 años la nombraron la mejor jugadora de fútbol de su edad y salió en la televisión. La reacción de su madre fue pegarle, por lo que siguió jugando a escondidas. 

La selección femenina de Afganistán optó por el exilio. En abril del año pasado jugaron su primer partido en Australia, lugar en que las jugadoras encontraron refugio. Suerte que no tuvo una destacada voleibolista: Mahjabin Hakimi era una joven jugadora de la selección afgana y una de las promesas del deporte nacional que además, participaba de torneos internacionales con un club de Kabul. Fue decapitada por los talibanes en octubre de 2021.