Darío Lezcano poco a poco comienza a sentirse parte de Colo Colo. El delantero paraguayo de 32 años superó los exámenes médicos y el club está a punto de oficializar la contratación del ariete que se erigió como máximo goleador del Juárez FC en la Liga MX.
Por cierto, Gustavo Quinteros ya tiene al atacante que necesitaba para hacer el intento de olvidar a Juan Martín Lucero, quien ya tuvo sus primeros minutos en cancha por el Fortaleza de Brasil. Pero el ex seleccionador de Ecuador y Bolivia tendrá que aguardar por el jugador, que también registra pasos por el fútbol de Suiza y de Alemania.
Según la información a la que tuvo acceso RedGol, Lezcano todavía no cuenta con la visa de trabajo que le permita desempeñar la función para la que será contratado en el Cacique. Ese trámite es el que ha dilatado también la oficialización de su fichaje y también que se sume a los entrenamientos, algo de lo que dio cuenta César Fuentes.
“Si le va bien, nos va bien a nosotros. Sólo desearle éxito. Esperamos que llegue luego y se ponga a la par nuestra lo antes posible”, apuntó el Corralero sobre su flamante compañero. Eso sí, hay un documento que falta y que hará más larga la espera para que el Eterno Campeón cuente con el ex artillero del Ingolstadt alemán.
El Juárez FC debe enviar un documento para habilitar a Lezcano
Por cierto, ese documento no depende del jugador. Ni tampoco de Colo Colo. Es algo que debe resolver el club anterior del Motochorro, el Juárez FC. Así las cosas, Darío Lezcano deberá esperar para debutar con el número “16” en la espalda, el mismo que llevó Óscar Opazo durante su estadía en el club.
De hecho, a todo eso se suma la urgencia de culminar la inscripción del futbolista en los registros de la ANFP y la Federación de Fútbol de Chile para que pueda participar de los distintos campeonatos donde el Cacique tendra acción. Y ese proceso quedará cerrado el miércoles 08de febrero a las 23:59 con 59 segundos, cuando se concluya el mercado de pases veraniego en Chile para la campaña 2023. ¿Qué pasará? Tic, tac, tic, tac…
