El clásico entre Universidad Católica y Colo Colo, que terminó con un agónico 1-1 tras gol de Alexander Oroz como respuesta al penal que convirtió Fernando Zampedri al principio del cotejo, fue empañado por gravísimos incidentes en San Carlos que siguen sumando hechos lamentables: a la bomba de estruendo que le cayó a Brayan Cortés y la trifulca en la tribuna Sergio Livingstone, se sumó un robo en el camarín del Cacique.
Así lo advirtió el presidente albo, Edmundo Valladares. “Empate a lo Colo Colo, con garra y pundonor. Pero impresentable la seguridad de San Carlos Carlos de Apoquindo: no sólo fueron los proyectiles a la cancha, también la desaparición de ropa y herramientas de trabajo en el camarín del cuerpo técnico. Ni hablar de la agresión en tribuna a hinchas”, comentó el periodista en sus redes sociales, hecho que constató Gustavo Quinteros al ser expulsado y volver a la zona de vestuarios.
El vicepresidente del Colo Colo, Edison Marchant, agregó otro antecedente. “Impresentable la seguridad en San Carlos. Más allá de los proyectiles, el artificio, humo, extintores y la golpiza a gente, también sufrimos la desaparición de vestimenta y herramientas tecnológicas en el camarín del cuerpo técnico. ¿Hay cámaras? Claro que sí, pero tapadas”, denunció el dirigente albo.
Todo lo sucedido fuera de la cancha en San Carlos terminó opacando un partido que fue intenso y que terminó con un empate. Ahora, la UC debe recibir en el mismo recinto a Flamengo y Colo Colo tiene que ser local ante River Plate, ambos por la Copa Libertadores.
