Cuando el foco debería estar puesto en la conformación del plantel, en Colo Colo tienen la mira en otra parte. Este martes se llevará a cabo el remate del 13,46% de las acciones de Blanco y Negro, lo que tiene expectantes a los hinchas ante el arribo de nuevos directores.
Sorpresivamente, en las últimas horas se anunció que la Sociedad Anómina que administra al Cacique venderá más del 10%, lo que sin duda traerá una serie de coletazos. Cambios internos y temas de presupuesto son los puntos que más tienen preocupados a los fanáticos.
Pero más allá del remate de dichas acciones, lo que llama la atención es que se desconocen tanto los motivos como los involucrados en la movida. De hecho, no se sabe quién es la persona que está detrás de la venta.
La cita se llevará a cabo a partir de las 11:30 horas y se estima que cada una tenga un valor al borde de los $200 como mínimo. Eso ha despertado el interés de varios, aunque lo inesperado del anuncio deja al margen a los hinchas.
Lo que pase en este encuentro será fundamental para conocer el futuro de Blanco y Negro, pero principalmente Colo Colo.
Y es que en caso de llegar nuevos directores, la votación de abril del 2023 tomará un valor importante para conocer a la mesa directiva de la próxima temporada, en la que el Cacique está llamado a pelear tanto en el plano local como internacional.
Tema refuerzos queda en pausa por los cambios en Blanco y Negro
Si bien Colo Colo logró el arribo de Fernando de Paul y solo restan detalles para que también se concrete lo de Ramiro González, la venta de acciones llega a sacudir las cosas en un momento clave. Y es que el tema de refuerzo ha quedado al margen ante los cambios internos y pueden costar caro para el 2023.
La inesperada salida de Gabriel Costa, la inminente partida de Gabriel Suazo y las chances de que óscar Opazo se vaya a Racing obligan a tomar medidas pronto. Aunque con el remate esto queda en pausa e incluso instala incertidumbre para ir a buscar jugadores en el mercado de pases.
Colo Colo nuevamente puede tener cambios en su administradora. Nadie sabe quién vende y mucho menos quién puede llegar.
