La semana previa a la obtención de la estrella 33 por parte de Colo Colo, que vuelve a ser campeón del fútbol chileno después de cinco años, estuvo marcado por una noticia de mercado que levantó cejas en el estadio Monumental. Su protagonista era Gabriel Costa, quien termina contrato con el Cacique y debe decidir su futuro.
La información de que Universidad de Chile tiene en el horizonte al mediapunta de 32 años no dejó indiferentes en el cuadro popular. Pero el máximo ídolo de la historia alba, Carlos Humberto Caszely, desconecta las alarmas y se resigna ante un posible salto del seleccionado peruano al archirrival.
“En el año 70, en los hexagonales internacionales, Colo Colo pedía jugadores de la U y la U pedía jugadores de Colo Colo. No se olviden de que el gran Leonel Sánchez jugó en Colo Colo y fue campeón con Colo Colo. No se olviden de que el Pato Yáñez jugó en la Chile y en Colo Colo. Hay varios jugadores”, recuerda el Rey del Metro Cuadrado.
El ex delantero mundialista también se refiere a uno de sus grandes socios, Severino Vasconvelos.”El Negro Vasco, que era ídolo de Colo Colo, se fue a jugar a la U para ayudarla a subir de Segunda a Primera. Me decían el Chico (Héctor) Hoffens y Sandrino Castec, ¡pucha que la hizo bien el Negro Vasco, nos dio fuerza, gol, pase, para poder subir a Primera División!'”, atesora el ídolo albo.
Por eso, se toma con agüita mineral la opción de que Costa vista de azul en 2023. “Hoy las cosas han cambiado mucho. No olviden de que todo está dirigido por sociedades anónimas y da lo mismo a dónde vaya: el jugador tiene que asegurar su futuro económico. La carrera es corta, y si le ofrecen un buen contrato va a depender de él si irse o no”, completa.
Gabriel Costa llegó a Colo Colo de la mano de Mario Salas, quien fue su entrenador en Sporting Cristal de Perú. Desde 2019, el uruguayo de nacimiento acumula 120 partidos oficiales por Colo Colo, con 37 goles y 21 asistencias; dos títulos de la Copa Chile, uno de la Supercopa y la flamante corona del Campeonato Nacional 2022.