Las esquirlas de la expulsión decretada contra Deportes Melipilla por el caso de los dobles contratos no se han terminado. Y específicamente en Huachipato, que salió a aclarar la situación en la que queda el equipo después de la sentencia contra los Potros.
A través de Twitter, el timonel del cuadro acerero, Victoriano Cerda, desmintió lo expuesto por Carlos Campos, periodista de diario Concepción y La Tercera, quien advirtió que Huachipato seguiría en zona de descenso directo después de la desafiliación melipillana.
Ante esto, Cerda posteó un pantallazo del reglamento del Campeonato Nacional, que justificaría que Huachipato zafe del descenso directo y juegue la promoción ante Deportes Copiapó. “Eso no más”, expuso con emojis de un hombre que se lleva la mano a la cara.
El debate continuó cuando el profesional de las comunicaciones hizo ver que el reglamento habla de desafiliación y no de expulsión, y Victoriano subió un cambio con su defensa a la opción siderúrgica.
“Expulsión y desafiliación son equivalentes. La primera la decide el Tribunal, la segunda el Consejo, pero son lo mismo. Entiendo (aunque no comprendo) su sesgo permanente, pero ojalá se tenga un mínimo de rigurosidad”, respondió Cerda.
La contestación de Campos no se hizo esperar, y atacó la condición de víctima del dirigente. “Es curioso que siempre son los demás los equivocados, nunca usted. Lo que entiende por sesgo, muchas veces es periodismo. Las relaciones publicas no son lo mío”, contradijo.
Hasta ahí bien. Pero Victoriano quiso ponerle punto final al debate con una controvertida salida. Nada menos que enviar al periodista a reportear en una conocida página porno. “Siga informándose en Pornhub.com”, concluyó el dirigente acerero.
Melipilla anunció apelación a la segunda sala del Tribunal de Discipluna, por lo que se mantiene en vilo la confirmación sobre si Huachipato se quedará o no en Primera División, después de feinalizar en el penúltimo lugar del Campeonato Nacional.
El debate en Twitter entre el presidente de Huachipato y un periodista penquista terminó en una invitación a ver porno en la web
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