Con 39 años de edad y 20 de ellos como futbolista, Jaime Valdés ha pasado de todo en su carrera. La tuvo difícil en sus inicios, pero también vivió la gloria en Italia y Colo Colo.

A través de una transmisión de Instagram Live de Rodrigo Tolzen, el Pájaro contó la anécdota de cuando recibió su primer sueldo de futbolista en Palestino con tan solo 18 años.

"En el año 1999 yo tenía 18 recién cumplidos y me llaman los dirigentes de Palestino y me dicen ‘¿cuántas micros tomas? ¿cuánta plata gastas?’, porque en ese tiempo me ayudaban con 50 lucas y me querían arreglar porque ya me habían subido al primer equipo", comenzó.

Valdés contó con lujos y detalles la conversación con el dirigente árabe. "Hablé con un dirigente y me dice, ‘ya, ¿cuánto quieres ganar? Me dijo eso y me volví loco. Yo no tenía nociones para decir algo, además el ingreso de mi familia era un sueldo mínimo, en ese tiempo era como 150 lucas. Entonces yo le digo quiero ganar 400 lucas y el weón me dice ‘ya, te vamos a subir el sueldo a 400 lucas’", expresó.

Además agregó que, "ahí me vuelve a preguntar ‘¿donde vives?, ¿cuántos hermanos tienes? ¿Cuántas habitaciones tiene tu casa? y yo le digo en El Bosque, en unas casas copeva llena de hongos, tengo cinco hermanos y dos habitaciones. Ahi me dice, ‘ya, te vamos a arrendar una casa, te pasaremos 150 lucas más’. Ahí llevaba 550".

El ex jugador de Palestino siguió narrando entre risas y revela cómo fue aumentando su sueldo al doble. "Este weón me vuelve a hablar y me dice ‘por cada partido de titular son 50 lucas más y si estas en la banca 25 más’. Justo me tocó jugar los cuatro partidos y fueron 200 más, ósea, 750 lucas. Ahí me vuelve a decir que le iban a dar 100 a mi mamá para la alimentación, ósea 850 lucas. Ahí quería que puro llegara fin de mes jajaja", detalló.

Finalmente ese día llegó y Jaime Valdés fue feliz, aunque la pasó mal para llegar a casa. "Llega fin de mes, con 18 años me pasaron la plata en efectivo y me tuve que ir pa la casa con los bolsillos llenos de plata y en la micro csm. Tomé una micro con dirección a La Pintana que pasaba por Gabriela, me fui al lado del chofer todo el rato, eran 850 lucas, nunca había visto tanta plata, llegué a la casa y la puse en la cama. Saqué lo mío y lo otro se lo di a mi mamá, después me fui a comprar ropa al persa altiro", sentenció entre risas.