Universidad Católica jugó un discreto partido ante Universidad de Chile, donde careció de la profundidad que exhibió en los últimos duelos y se vio sorprendido por la intensidad que mostró el elenco azul, que por varios pasajes del partido incomodó mucho al elenco de Ariel Holan.

La derrota por 1-0 pareció justa, por más que en algún momento pareció que los azules iban a aumentar el marcador pues sus delanteros no estuvieron muy finos en varias jugadas. Eso sí, al otro lado Fernando Zampedri se perdió un gol solo, que era el empate en el final.

De todas maneras en los cruzados hay optimismo de cara a la revancha, que se jugará el miércoles en Valparaíso. Así al menos lo reflejó Mauricio Isla, quien en el Santa Laura no fue capaz de hacer el daño al que estaba acostumbrado.

Consultado a la salida del Santa Laura por el adverso resultado, respondió "queda otro partido, tranquilos", evidenciando la confianza que hay en el camarín de la UC para poder dar vuelta la llave y meterse a semifinales.

Isla no fue bien recibido en Independencia por los fanáticos de la U, que constantemente lo pifiaron y le gritaron improperios por haber firmado en la Católica, luego de que por largos años asegurara que su corazón es azul y que pretendía jugar en el Bulla.

Para ese encuentro la UC no podrá contar con César Pinares, quien debió ser reemplazado en el entretiempo debido a una lesión muscular, por lo que Holan deberá armar el puzzle en el mediocampo para sustituir al ex Gremio.