Universidad Católica festeja y todo el fútbol chileno agradece el regreso de Luciano Aued tras meses muy complicados. El mediocampista cruzado recibió el alta médica luego de un largo tratamiento por un dolor torácico que incluso derivó en molestias en el pecho y un brazo en medio de exámenes y evaluación cardíaca.
Hoy el volante enfrentó los micrófonos en rueda de prensa, considerado por Ariel Holan entre los probables titulares de la UC para el duelo de este sábado como visita frente a San Felipe por la ida de la tercera ronda de la Copa Chile, el vamos de La Franja al segundo semestre.
“Es como renacer, volver a vivir. Vengo trabajando desde lo físico muy bien, pero en el fútbol la competencia te la da los partidos”, dijo Luli con un rostro que contagiaba alegría.
“Estoy muy feliz de haber recibido el alta después de un proceso que fue muy duro, quiero tomarme este tiempo para agradecerle, si bien ayer lo hice con los más cercanos, al doctor Fernando Yáñez, que fue quien me ha cuidado y tratado de maravilla desde que llegué al club. Al doctor Fernando Martínez y a su staff, a las enfermeras del hospital Marcoleta, hicieron un trabajo bárbaro. A los médicos del club, a los kinesiólogos y a toda la otra gente que trabaja en el club, porque me han ayudado mucho. No quiero olvidarme de nadie, porque han sido todos muy importantes para que esté de vuelta acá”, agregó el oriundo de La Plata.
En medio de su relato, Aued hizo un llamado indirecto a estar atentos a los signos que entrega el cuerpo: “en primer momento del proceso fue entrenar normal y los médicos me dijeron que habían salido mal los exámenes al corazón que me había hecho, porque hace seis meses que venía con una dolencia. Pero por mi forma de ser no quería parar, no le di tanta importancia. Estuvo muy cerquita de ser algo trágico. Ahí uno toma conciencia de la gravedad. Al no tener un episodio grave me daba ánimo para seguir adelante”, contó.
Complementa que entonces “fue difícil, fue llegar a la casa y llorar, estar con mi familia. Después no quejarme y pensar que a cualquiera le puede pasar, nadie está exento y entenderlo de ese lado me ayudo a comprender lo que estaba por delante. Y la gente que me rodeó siempre me ayudó a estar positivo y saber que de esto iba a salir. El proceso fue muy duro, hay que estar fuertes de la cabeza para no decaer”.
“El doctor me decía para qué quieres correr a los 10 días si tienes seis meses por delante de tratamiento. Pero yo necesito sentirme que estoy entrenando, y le contestaba déjame volver al club que me hace bien. Lo entendieron y todos me acompañaron de manera brillante, no me quedaba más que salir adelante”, añadió el referente cruzado.
Por último, Luciano Aued sentenció que “estoy feliz, para mí esto es volver a vivir, lo tomo de esa manera. Es volver a debutar en el fútbol. Tengo esas ganas, hambre y deseos. Habrá un proceso porque llevo cinco meses que no compito pese a que hace meses entreno. La competencia es distinta, te la da los partidos. Si vamos a lo físico y futbolístico, hace casi cuatro meses entreno a la par de todos. Quiero ser una ayuda para el equipo y sumar. Que entre todos pongamos a Católica en los primeros lugares donde nos acostumbramos a estar”.