Nano Calderón se negó a cumplir con los exámenes a realizarse en el Servicio Médico Legal, en medio de un episodio que se vivió a primera hora de este lunes, a días de haber sido trasladado hasta la cárcel Santiago 1 para cumplir con su prisión preventiva.
El hijo de Raquel Argandoña fue conducido por Gendarmería hasta el recinto en avenida La Paz, a eso de las 06:30, para enfrentar los peritajes psicológicos requeridos insistentemente por el Ministerio Público.
Los test deben ser ejecutados por el psiquiatra del SML, momento en el que se establece una conversación con el imputado en torno a una metodología específica, para determinar el estado de salud mental en que se encuentra.
Al llegar a enfrentarse con el especialista, Nano hizo uso de su derecho a guardar silencio y no entregó ningún tipo de declaración, desistiendo así someterse a los exámenes psicológicos., según informó "Hola Chile", de La Red.
Este tipo de peritajes ha sido solicitado por la Fiscalía en tres instancias, desde la audiencia de formalización de Nano, que tuvo lugar el pasado 18 de agosto, pero siempre se ha negado.
Lo que busca el Ministerio Público es determinar si el joven de 23 años es o no imputable ante la ley, algo que se mantiene sin respuesta ante los constantes bloqueos de los procedimientos.
A eso se suma el hecho de que la Corte de Apelaciones prácticamente barrió con el informe psicológico presentado originalmente por la defensa, debido a que había sido evacuado por personal pagado por el mismo imputado.
