Cuando la teleserie que vive Novak Djokovic en el Australian Open parecía calmarse un poco, todo volvió a arder después de que una grave acusación cayera en su contra. Esto porque las autoridades australianas ahora lo investigan por la declaración que hizo al momento de llegar a la tierra de los canguros, con la cual incluso podría quedar tras las rejas.
El tenista serbio marcó “no” en la opción del formulario de ingreso que consultaba si es que ha visitado algún otro lugar del mundo 14 días antes de su llegada al país oceánico, pero unapublicación en su cuenta de Instagram lo pondría en jaque. Así al menos lo destacó Mundo Deportivo desdeEspaña.
“Según sus documentos médicosestaba infectado conCovid-19 el 16 de diciembre,pasó las navidades en Belgrado de acuerdocon las fotografías publicadas en las redes sociales, antes de trasladarse a España, desde donde partió el 4 de enero hacia Melbourne”, detalla el citado medio.
Pero eso no es todo, ya que todo podría ponerse peor, ya que también advierten que las “leyes australianas consideran como una “ofensa seria” una declaración falsa y quepuede acarrear una pena máxima de hasta doce meses de cárcel”.
Mundo Deportivo compartió el formulario de ingreso de Novak Djokovic a Australia, un drama que se vive minuto a minuto. (Foto: Captura)
Situación ante la cual en el gobierno español no se quedaron indiferentesy fue José Manuel Albares,el mismísimo ministro de Asuntos Exteriores, quien reconoció que “no tiene constancia” de que el deportista de 34 años iniciara su periplo en España, donde hizo escala en Dubái previo a empezar su drama en Australia.
El diplómatico español justificó sus declaraciones señalando que su cargo no le da la facultad de regir las fronteras exteriores, ni que tampoco desde el gobierno australiano los han contactado para solicitar la información correspondiente para la investigación.
A pesar de los problemas, Nole tiene su mente puesta en revalidar su título del Abierto de Australia 2022. (Foto: Getty)
Así las cosas, Nole continúa feliz de la vida entrenando en Melbourne Park después de que la decisión de revocar su visa fuera invalidada y haya podido quedar en libertad, pero sin duda las autoridades oceánicas quedaron con sangre en el ojo con el número 1 del mundo y seguirán intentando sacarlo del país.
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