Pese a las ganas que tiene sus principales impulsores de que el proyecto tome vuelo, lo cierto es que la Superliga de Europa cada vez va perdiendo más energía. Por mucho que la justicia del viejo continente diera una especie de luz verde al torneo ideado por Florentino Pérez, hay muchos equipos y federaciones que salieron a rechazar esta idea.
Una de las entidades que de plano descartó participar de la Superliga fue la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), donde se prometieron las verdaderas penas del infierno para los equipos que tengan en mente participar de la competencia.
Según información entrada por ‘Calcio e Finanza’, en su último Consejo Federal de la FIGC celebrado la semana pasada se aprobó el sistema de finanzas para la inscripción de los equipos en las ligas italiana de la temporada 2024-2025.
En esa cita se dejó en claro que los equipos que quieran participar de la próxima Serie A deben firmar un compromiso escrito de no participar en competiciones organizadas por asociaciones privadas no reconocidas por FIFA, UEFA y FIGC.
Este compromiso debe presentarse antes del próximo 4 de junio del 2024. Los equipos que quieran obtener la licencia para participar en la Serie A 2024-25, deben firmar ese documento. ¿Y si no lo firman? Pues quedan expulsados del Calcio. Así de simple,
De momento, el único equipo italiano que ha mostrado cierto interés en la Superliga de Europa es el Napoli. Claro, ahora habrá que ver su postura al hacerse públicos estos duros castigos que arriesga.
Una Superliga que nadie quiere jugar
De momento los únicos equipos que apoyan la idea y están dispuestos a jugar la Superliga de Europa son Real Madrid y Barcelona. Prácticamente de todo el viejo continente han rechazado este proyecto.
Esta negativa de Italia hay que sumarla a la de Inglaterra y Alemania, dos países que por diferentes razones se restaron de decir presente en el torneo.
En el caso de los clubes ingleses, el acuerdo pactado con la Premier League descarta de lleno cualquier participación. Además, el hecho de que el Reino Unido tras el Brexit no sea más parte de la Unión Europea, prohíbe que sus equipos puedan participar en otra competición.
Por el lado alemán, el poder de los socios de sus clubes es para tomar nota. No creen que participar en la Superliga sea algo justo, sobre todo con los elencos más chicos al lado de los gigantes teutones. Acá, como los socios tiene parte mayoritaria en el poder de decisión de los diferentes clubes, la opción de verlos en este torneo se ve casi imposible.
Toda la actualidad del fútbol y deporte nacional e internacional en la palma de tu mano. Sigue el grupo de WhatsApp de Redgol y encuéntranos también en Google News. ¡No te pierdas de ninguna novedad!