Si bien el Valencia, post Sampaoli, ya había comenzado a recuperar su nivel, el triunfo ante el Real Madrid es probablemente el auge de esa recuperación o, por lo menos, su comprobación. El equipo ché venció por la mínima en el Mestalla a los merengues, en un duelo con un final polémico.

En el primer tiempo, tras una serie de toques al borde del área, Justin Kluivert lanzó un tiro mordido que resultó en un buen pase en el área. Diego López, atento a la jugada, aprovechó el balón suelto y definió casi a boca del arco defendido por Thibaut Courtois. Era la apertura de la cuenta para el Valencia, cuando el reloj marcaba los mismos minutos que los mineros, 33′.

El Madrid intentó volver sobre el marcador. Pero, aún teniendo un control mayoritario del juego, no podía resolver el enigma de la defensa valenciana, que con fortaleza mental y un poco de suerte conseguía irse con la portería en cero al medio tiempo.

En la segunda mitad, Ancelotti movió las fichas. Rodrygo entró en vez de Camavinga, con la idea de reforzar aún más el ataque madridista. Por su parte, y dándose cuenta que el equipo que, en esta ocasión, vestía de gris se les venía encima, Rubén Baraja decidió reforzar la retaguardia. Chao Diego López, adiós Edinson Cavani. Adentro el defensor francés Dimitri Foulquier y el centrocampista brasileño, Samuel Lino, ambos a los 58′.

Los cerebros estratégicos, tanto de Ancelotti como de Baraja se estrujaban. Varios cambios trataban de reorganizar el naipe en cancha. El Madrid metía a Luka Modric y Tony Kroos, viejos cracks, mientras que el local metía a otro defensa, Toni Lato.

Pero poner más jugadores ofensivos no siempre se traduce en ser un equipo que ataca más. De hecho, a los 84′ Justin Kluivert aprovechó un balón filtrado para mandarla al fondo de las redes. Eso sí, todo fue invalidado por fuera de juego. El suspenso continuaba, el resultado no era imponente.

Diez minutos de descuento dio Ricardo Burgos. En ese tiempo, un tiro de Kroos casi se convierte en empate, pero una buena reacción del meta ché, Giorgi Mamardashvili evitó le cortó el merengue al Real.

El mismo meta fue protagonista de la jugada más polémica del partido. Tras una falta de Vinicius Junior contra un jugador del Valencia, Mamardashvili llegó corriendo a encarar al brasileño y se armó la trifulca. Vinicius, que ya había tenido un problema con un pasapelotas, le pegó en la cara a un jugador valenciano y se fue expulsado. Mientras se iba, le mostraba dos dedos, diciéndole a la hinchada local que se iban a segunda.

Pese al deseo del brasileño, el Valencia, con este triunfo, alcanza los 40 puntos y se escapa por cinco unidades de la zona de descenso. Por otro lado, el Real Madrid ya sabía que no podría alcanzar al Barcelona, ya campeón, pero sí fue desplazado del segundo lugar por el Atlético de Madrid, que venció al Osasuna por 3-0.