Claudio Bravo está llegando a un momento de definiciones en su carrera. Con su club, el Real Betis, se preparan para jugar el clásico ante el Sevilla el fin de semana en La Liga, además que piensa en el tema de su renovación.
Si bien no quiere que la conversación pendiente lo desvíe de la concentración, para cumplir el objetivo de volver a poner a su equipo en competencias internacionales, el tema del último contrato siempre está presente.
Una situación que, también lo ubica en el final de su carrera, donde el propio capitán de la selección chilena asegura que no se pone nervioso por lo que viene.
“No me apresuro a nada, tengo una edad que soy un privilegiado dentro de mi trabajo, pero eso lo determina el cuerpo, la cabeza también, si se quiere plantear objetivos y desafíos”, comentó en una charla con la página oficial del Betis.
En ese sentido, no tiene un plan definido pensando en la próxima temporada, donde está en un momento de agradecer por todo lo que le ha tocado vivir en la carrera.
“En ese aspecto no tengo prisa, si toca seguir bien, si toca ir a casa también. Mientras me sienta util y en forma de competir, eso puede continuar. Pero si pasa lo otro, me voy feliz a casa a disfrutar de mi familia, a disfrutar de lo que hice en mi carrera que no ha sido menor y no pasa nada, sin despedida ni nada. Tal como empecé en silencio terminaré también mi carrera”, precisa.
El clásico
Este domingo se paraliza la ciudad cuando se enfrenten el Betis y el Sevilla, en un clásico que puede definir muchas cosas con los objetivos de ambos planteles, donde los dirigidos de Manuel Pellegrini están luchando por volver a competir en Europa, por lo que saben la importancia que tiene conseguir los tres puntos.
“Mucho, por lo atractivo que es, por todo lo que mueve, por lo que significa, por las pretensiones nuestras en La Liga. Llegamos en un momento bueno, si era hace unas semanas atrás no era idóneo, pero las últimas presentaciones refuerzan muchas cosas de cara a estos partidos importantes”, comentó el portero.
Si bien hay momentos en que le ha tocado ir a la banca de suplentes, cree tener la madurez necesaria para afrontar esas jornadas, además de tener siempre en mente el sobreponerse.
“Más que sufrir intento revertir las situaciones, se la valía que tengo en el vestuario, se la manera de desenvolverme ante situaciones adversas, si se puede decir así, pero intento siempre mejorar jugando o no jugando. El rol de cada uno es valioso en un grupo e intento dar lo mejor de mi en cada momento, si es jugando mejor. Me encanta competir, me encanta estar en partidos importantes, que es para lo que uno trabaja”, finaliza.