Pedri González es, sin duda, uno de los futbolistas más prometedores del mundo y a sus 19 años el ganador más reciente del premio Golden Boy dio una nueva demostración de toda su categoría en la goleada de 4-0 de Barcelona sobre Athletic Club de Bilbao que ratifica el gran momento que vive el equipo.

El mediocampista fue fundamental en la creación de juego de los de Xavi Hernández, que cierran un mes de febrero en el que el proyecto del entrenador parece empezar a rendir muy buenos frutos pero no conforme a eso dejó una pincelada para el recuerdo ya en el segundo tiempo.

Jugándose el minuto 80, el ex de Las Palmas recibió la pelota cerca del banderín de tiro de esquina del lado del terreno de juego de los blaugranas cuando fue presionado por Mikel Balenziaga cuando llegó el tremendo lujo y le lanzó un túnel de altísima factura al futbolista del cuadro vasco.

Con el Camp Nou enloquecido con la maravilla hecha por su jugador, rápidamente llegó el recuerdo del hecho por Juan Román Riquelme a Mario Yepes en un clásico entre Boca Juniors y River Plate por el compromiso de vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores de 2000, que finalmente ganaron los xeneizes.

Pedri, además, aportó un tremendo cambio de banda para encontrar desmarcado a Ousmane Dembélé al minuto 90 quien desde la derecha puso un tremendo centro a Luuk de Jong para poner el 3-0 en el marcador que reafirmaba la tremenda superioridad de Barcelona que alcanzó a anotar otro más.