La lesión de Carlos Carmona le abrió un nuevo escenario a Colo Colo: a contrapelo de lo que había declarado Marcelo Espina en la despedida de Agustín Orión, ahora el cacique sí buscará un refuerzo.
“El tema de refuerzo lo está viendo Marcelo Espina con Mario Salas y se abrió la posibilidad después de la lesión de Carlos Carmona. Hablan de cuatro a seis semanas y nos estamos jugando cosas importantes. Están viendo la posición, jugador, edad y cuando lo tengan claro nos van a hacer llegar la información y vamos a apoyar la propuesta”, confirmó el presidente de Blanco y Negro, Aníbal Mosa.
“Estamos abiertos. Si Marcelo Espina con Mario Salas quieren un jugador, se los vamos a dar. Estamos para apoyar la labor de Mario. Si están convencidos, y trabajan muy de la mano, se hará. Tienen toda la confianza del directorio. Creemos en este equipo de trabajo”, profundizó el empresario.
De esta manera, los albos buscarán un volante que puede no responder a las mismas características de Carmona. En ese sentido, Leonardo Gil es una opción, pero Rosario Central sólo quiere una venta completa del pase por una cifra cercana a los 2 millones de dólares.