Una guerra de comunicados. Apenas cuatro horas después de que la Primera B acusara a la Segunda División de comportarse como “falsa víctima” en el polémico ajuste de los descensos en los campeonatos de 2021, apareció la respuesta de la tercera categoría.
A través de un comunicado firmado por los doce equipos de esta serie, la Segunda expresa su “asombro por la falta de argumentos ciertos y el escaso pudor demostrado por un sector del fútbol chileno que intenta disimular un dolo provio y desviar la realidad”.
El escrito subraya que las decisiones que operan sobre las tres categorías son responsabilidad del Consejo de Presidentes de la ANFP, integrado por representantes de Primera División y Primera B, pero no de la Segunda División.
Por eso, critica la postura de “desconocer las consecuencias de las decisiones que cada uno toma y cuando existen problemas mirar hacia el lado y culpar a quien ni siquiera es parte”, sentencianlos clubes asociados.
“¿Qué mayor colaboración puede prestar una división al servicio del fútbol nacional que desarrollar todo el torneo bajo su exclusivo costo, sin con apoyo económico y cumpliendo condiciones de competencia que no puede decidir, sino sólo acatar”, puntualizan.
Por esta razón, desde el organismo invitan a “conversar de frente, sin más comunicados. Aclarémosles a la opinión pública, y sobre todo a los más de 300 futbolistas que no tendrán trabajo si paraliza la Segunda División, cuál es la postura del Consejo de Presidentes”.
En este sentido, señala que la dirigencia del fútbol le debe una explicación al Sifup, con el que se reunirá durante la presente jornada, y pide “ir con la pelota al frente” y que “conversemos en público”, en el marzo de una polémica que pone en riesgo el esperado inicio de la temporada.
Alarma de paro de futbolistas
Cabe señalar que el Consejo de Presidentes decidió cambiar el ascenso directo de Segunda División a Primera B por un partido de promoción entre el campeón de la tercera categoría y el colista de la división de plata.
Esta decisión puso en alerta al Sifup, que durante la jornada deberá tomar su decisión respecto a una convocatoria a paro o huelga de futbolistas, que se desarrolle a partir del inicio de la temporada, el próximo 21 de marzo con la final de la Supercopa.