Ñublense partió con el pie izquierdo su participación en la Copa Libertadores 2023. El cuadro chillanejo, pese a todavía no jugar un solo partido, ya está sufriendo dolores de cabeza ante la imposibilidad de usar el Estadio Nelson Oyarzún en sus partidos en la cita continental.
La Conmebol consideró que el recinto de Chillán no está en condiciones para recibir partidos en la cita continental y por lo mismo mandó a Ñublense a jugar sus cotejos al Ester Roa de Concepción, lugar donde el alcalde Álvaro Ortiz está gustoso de recibirlos.
Hernán Rosenblum, gerente general de los Diablos Rojos, afirmó que “nosotros fuimos partes de esta región también y el alcalde Ortiz nos echó una mano en un momento histórico para el club, pero también una situación compleja, porque es una pena muy grande el hecho de salir de nuestro estadio”.
Pese a la determinación de la Conmebol, en Ñublense avisaron que no bajarán los brazos en su afán de utilizar el Nelson Oyarzún. “No vamos a dejar de luchar. En cada partido que se juegue, nosotros volveremos a pedir la inspección de parte de Conmebol, para ver si podemos jugar en Chillán. Si no es así, estaremos complacidos de jugar en Concepción”, declaró Rosenblum.
De igual manera, en el gerente de Ñublense espera un fiesta en Concepción para los tres cotejos que jueguen por la Libertadores. “Nosotros pediremos aforo total, queremos que sea una fiesta para la ciudad y nuestros hinchas que vendrán en masa desde Chillán”, concluyó.
De esta forma, Ñublense vivirá su debut en Copa Libertadores el próximo miércoles 5 de abril desde las 20:00 horas en el Ester Roa de Concepción ante Racing de Argentina.