El escándalo que protagonizaron los árbitros chilenos, que incluyó la sospecha de una intervención del sistema VAR en la final de promoción entre Huachipato y Copiapó, y que determinó el despido del jefe del referato nacional, Javier Castrilli, seguirá dando que hablar.

Esta mañana, los abogados de la ANFP ingresaron la denuncia ante la Fiscalía Metropolitana Oriente, después de las conclusiones que dejó la investigación realizada por el oficial de cumplimiento de la entidad, Miguel Ángel Valdés.

Los antecedentes fueron puestos a disposición del Fiscal Regional subrogante, Felipe Sepúlveda. El Ministerio Público será el encargado de determinar la existencia de un delito y su tipificación en la justicia ordinaria.

Por su parte, los antecedentes también llegarán al Tribunal de Disciplina, encargado de establecer si existen faltas a los reglamentos de la asociación, que eventualmente puedan incurrir en sanciones para los múltiples implicados en el caso.

Cronología del caso de los árbitros y el VAR
 

El 26 de enero de 2022, Huachipato derrotó por 1-0 a Copiapó en la revancha de la final de promoción, con lo que aseguró un lugar en Primera División, pese a que anteriormente había descendido y recibió una vida más gracias a la relegación de Melipilla por secretaría.

La polémica estuvo en la sanción de la pena máxima por parte de Francisco Gilabert, quien determinó la falta penal y se dirigió al VAR a revisar la repetición, por indicación de los jueces de videoarbitraje que no advirtieron la infracción en primer término.

 

Gilabert desistió del cobro, pero después de unos minutos se le invita a ver una segunda imagen, en la que se advierte un tirón de camiseta casi imperceptible. En definitiva, el árbitro confirmó la decisión inicial y se ejecutó el lanzamiento penal que sentenció la llave.

Posteriormente se conocieron audios de los protagonistas, especialmente de Gilabert, que aseguraban que la falta fue cobrada por insistencia "de Santiago" y que el Quality Manager, Mario Vargas, quien acompañaba a los jueces de VAR, había traspasado esa información.

A esto se sumó una serie de denuncias periodísticas y una disputa de poderes al interior del sindicato de árbitros, con anuncio de paro incluido, que terminaron con el despido de Javier Castrilli, jefe del referato chileno, el 6 de abril pasado.

Finalmente, la investigación de la ANFP determinó que no hubo tal intervención, pero dejó abierta la puerta a una acción orquestada de una parte del arbitraje para desestabilizar a Castrilli, exponiendo esta situación a la prensa.