El agónico gol que Alexis Sánchez convirtió en la Supercopa de Italia lo convirtió en héroe del Inter de Milán. Los lombardos aún gritan eufóricos la viveza del tocopillano para batir a la Juventus, que demuestra estar en un gran momento de su carrera.
Una costumbre que el máximo goleador histórico de la Selección Chilena está acostumbrado a realizar desde que se inició en el fútbol, pateando la pelota en el desierto de Calama.
En Cobreloa, con apenas 17 años, fue la gran figura de los loínos en los playoffs que se desarrollaban el 2006 en nuestro país. Jugando ante Huachipato marcó los tres tantos con que el cuadro naranja venció a los acereros, maravillando a todo Chile y despertando el interés de Colo Colo, que días después lo ficharía.
En el cuadro albo también logró destacar. Primero desequilibrando un Superclásico muy cerrado, al anotar el transitorio 2-1 sobre la Universidad de Chile en el Monumental. Y meses después, su jerarquía la demostró en Copa Libertadores 2007, al convertirle tres anotaciones al Caracas en calidad de visitante.
Tras eso pasó a River, donde fue campeón el 2008 en el equipo que dirigía Diego Simeone. A pesar de una fea lesión en la primera etapa, se recuperó y anotó dos goles que son muy recordados en ese camino al título: el que abrió el camino para el triunfo 2-0 ante Vélez y el que anotó sobre el final ante Colón en la victoria 2-1 de los Millonarios.
Su destino era Europa, por lo que Udinese lo sumó a su primer equipo. En ese elenco, quedó en la retina de todos los hinchas los cuatro goles que le marcó a Palermo, en la goleada por 7-0 en calidad de visitante.
Con apenas 22 años pasó a Barcelona, luego de que Pep Guardiola recibiera muy buenas referencias por parte de Marcelo Bielsa. En los azulgranas, el gol que le marcó a Real Madrid el 2013 aún deja con los ojos estrellados a sus fanáticos, por el tremendo globito que le hizo a Diego López.
En su paso por Arsenal se cansó de marcar goles, por lo que se transformó en genio y figura. Claro que los hinchas Gunners jamás olvidaron el que hizo ante Tottenham en el clásico, que significó el 2-0 en noviembre de 2017 al clavar un derechazo arriba casi sin ángulo.
Incluso en Manchester United, donde no le fue bien, dejó un grato recuerdo: luego de que fueran perdiendo 2-0 ante Necastle en Old Trafford, Alexis apareció para marcar el 3-2 definitivo a los 90', consiguiendo así una remontada épica en octubre de 2018.
Por la Selección también tiene montones de goles muy celebrados, desde Copa América hasta un Mundial. Quizás el anotado ante Ecuador en las eliminatorias a Rusia sobre el final, para dejar a Chile con vida en ese momento, fue el que más haya gritado el tocopillano en el último tiempo.
Lo realizado en la Supercopa italiana solo viene a demostrar que Alexis es un súper clase, que aparece en los momentos más importantes de un partido y jamás se achica en los momentos en que un partido está cuesta arriba.
